Comisarios aseguran que los policías les robaron en el desalojo del bulevar
Los quejosos quienes son autoridades locales de pueblos pertenecientes a los
municipios de: Quechultenango, Chilapa, Tlacoapa y Malinaltepec, denunciaron
que desde hace 10 años iniciaron la gestión de dos tramos carreteros que
comunicarían de manera eficiente la zona de la montaña con la centro del
estado, con las gestiones lograron que se iniciara el proyecto y desde hace ocho
años destinara inversión para la carretera.
En cinco años se logró la construcción de 20
de los 60 kilómetros en la ruta Juxtlahuaca-Acatepec y 12 de los 84 que
comprende la vía Colotlipa- Ayutla, y el año pasado se aprobaron recursos para
incrementar 6 kilómetros más con una inversión aproximada de 24 millones de
pesos.
De acuerdo con los comisarios que ayer
ofrecieron una conferencia de prensa; para las obras que se iniciarían en
septiembre del año pasado se contrataron tres empresas que se presentaron en
las comunidades y dos de ellas aseguraron haber sido contratadas gracias a las
“buenas relaciones” que tienen en el gobierno, entre ellas una de nombre
“Edificadora de construcciones Kimex” misma que sólo cobró sus estimaciones y
se retiró dejando abandonado el proyecto, dicen.
El comisario auxiliar de El Epazote, Arturo
Gómez Vázquez, relató que durante el desalojo, tres elementos de la policía lo inmovilizaron,
lo llevaron atrás de las patrullas y al revisarle sus bolsas encontraron un
fajo de billetes de 500 pesos, en total 12 mil que traía porque su viaje a la
capital sería aprovechado para adquirir algunos enseres que se requieren en la
organización de la fiesta patronal del pueblo.
Los policías al ver que traía el dinero lo
revisaron bien, le quitaron el sello de la comisaría, su cartera y teléfono
celular, lo tiraron a un lado de los vehículos y después lo dejaron sólo para
que regresara con sus compañeros.
El resto de aparatos celulares son los que
traían los comisarios que fueron retenidos, a los que tampoco se les puso a disposición de
la autoridad ministerial, sólo se les retuvo, les quitaron sus pertenencias
y los soltaron cerca del palacio de
gobierno para que se juntaran con sus compañeros que habían caminado hasta la
avenida Rufo Figueroa.
Cabe señalar que también a un reportero los
policías le habían quitado su teléfono y gracias a la presión que realizaron un
grupo de trabajadores de comunicación ante el titular de la Secretaría de
Seguridad es que se lo devolvieron intacto. (Por Abel Miranda Ayala)
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