Se compromete H. Astudillo a detener y procesar a asesinos de los 10 músicos
El gobierno del estado está comprometido a investigar,
detener y procesar a quienes asesinaron a los 10 músicos integrantes del Grupo
Sensación Musical en el camino Mexcalcingo-Tlayelpan, municipio de Chilapa de
Álvarez, expresó el gobernador Héctor Astudillo Flores al acudir a la
comunidad
de Alcozacán a reunirse con los habitantes de esa zona de la Montaña Baja y a
expresarle su solidaridad a las familias dolientes.
Entrevistado al término de la reunión que sostuvo con
habitantes de 16 comunidades del municipio de Chilapa de Álvarez y autoridades
de la Policía Comunitaria de la Coordinadora Regional de Autoridades
Comunitarias y Pueblos Fundadores (CRAC-PF) en Alcozacán, el mandatario estatal
señaló a reporteros que acudieron a cubrir tal evento que su presencia en ese
lugar era para expresarle su solidaridad a los familiares de las 10 personas
que murieron en esos lamentables hechos.
En este sentido, apuntó: “que sepan, que a final de cuentas
el gobierno está comprometido en investigar y en detener y procesar a quienes
hicieron ese crimen”.
El gobernador Astudillo Flores fue enfático también al
calificar estos hechos: “fue un crimen, un homicidio doloso, fue un crimen
cobarde, alevoso y con una crueldad inaudita.
El gobernador del estado señaló que esa es precisamente la
razón por la cual acudió ayer a reunirse con las familias dolientes y con los
habitantes de los pueblos de esa parte de la Montaña Baja, pues reiteró que es
importante darle el seguimiento correspondiente a este caso, por ser un tema
muy delicado, el cual, además, “hay que enfrentar con una gran determinación”.
Astudillo Flores informó que son tres acuerdos importantes a
los que llegó con los habitantes de esas comunidades y con las autoridades la
Policía Comunitaria de la CRAC-PF: lo relacionado a una serie de averiguaciones
previas y órdenes de aprehensión que hay, respecto algunas personas que
seguramente son de algunos pueblos aquí; el asunto relacionado al reinicio de
clases en esa zona y a no permitir que los niños se vean involucrados en los
operativos que llevan a cabo los policías comunitarios, porque “a los niños hay
que cuidarlos y hay que encauzarlos”.
—¿Cuál fue la situación que hizo que los padres de estos
niños decidieran entrenarlos con armas? ¿En qué falló el estado para que esto
sucediera, para llegar a este punto?, cuestionó un reportero.
—Yo creo que hay indignación, que se comparte, hay un gran
enojo que es comprensible, (pero) es nuestra obligación también hacer un
llamado a que los niños en los términos de la
propia Constitución de México, los cuidemos, ¿no?. Entonces el enojo, la irritación, por
supuesto, el crimen colectivo que hubo alevoso, cobarde como lo he dicho. Pero
yo creo que es un momento también para hablarlo aquí mismo con el pueblo.
Entiendo que algunos están molestos, están irritados y lo entiendo, claro que
lo entiendo.
Mencionó también que el asunto de la violencia en esta zona
y en todo el estado, no es de hoy, sino que se viene arrastrando desde hace
mucho tiempo y al cual “hay que ponerle entre todos una mayor atención.
(Baltazar Jiménez Rosales)
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