Denuncian amenazas del alcalde de Copalillo


Dos regidores y la síndica procuradora del municipio de Copalillo acusaron a su presidente municipal, Julián Castro Santos, de amenazarlos de muerte para que dejen de reclamar por anomalías financieras y desvíos de recursos que se presentan en este lugar.
La síndica, Rufina Félix Gil, así como los regidores Lorenzo Castro Mejía y Jesús Alfredo Domínguez Morales, señalaron que desde el año pasado que inició la gestión municipal se propuso al alcalde que los ediles tuvieran la posibilidad de proponer una obra por año a fin de que esto les permitiera cumplir compromisos de campaña.
La respuesta del alcalde fue que mejor se asignarían salarios de 40 mil pesos para los regidores, 50 mil a la síndica y 80 mil para el alcalde y con ese dinero se podría atender la demanda ciudadana, los regidores aceptaron y pidieron que se firmara un acuerdo en el cabildo, para ello se citó a una reunión en el mes de julio, sin embargo, al presentar la orden del día no estaba contemplado el punto y sí se contenía un acuerdo para aprobar de manera extemporánea la cuenta del primer trimestre del año que debió presentarse en los primeros meses del año.
Los ediles se negaron a aprobar ese documento y ello rompió relación entre los ediles de tal manera que no les autorizó el recuso para gestión y tampoco les permitió proponer obras en la comunidad a partir de eso los regidores han estado haciendo observaciones de la mala ejecución de los recursos y ello derivó en amenazas a los regidores mediante llamadas telefónicas en las que con groserías les exigen dejar de criticar al gobierno municipal.
“Tenemos casos tan aberrantes como una obra de rehabilitación del sistema de agua potable en la calle de acceso a la unidad deportiva en la que se invirtieron un millón 131 mil 204 pesos y la obra es inoperante, porque solo se enterró el tubo y no hay un lugar a donde conectarla”, esta obra indicó que fue observada por la auditoría superior del estado.
Además en el recurso del 2019 se contemplaron 600 mil pesos para la compra de una patrulla de policía y el recurso ya se ejerció pero no han comprado nada, los policías siguen en una camioneta vieja que sólo tiene la mitad del asiento y así salen a trabajar.
Además los uniformados tiene que gastar de su salario para comprar municiones, uniformes e incluso para ponerle gasolina a la patrulla porque el alcalde se niega a dotarles de lo mínimo para el desempeño de sus labores.
Nosotros aunque somos del mismo partido hemos sido críticos de la administración y por eso nos han amenazado por ello hacemos responsable al alcalde Julián Castro Santos, de cualquier cosas que pueda pasarnos, y desde aquí le decimos que no desistiremos en la exigencia de transparencia y oportuna rendición de cuentas. (Por Abel Miranda Ayala)

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