Niños humildes reclaman les permitan usar los salones de su nueva escuela
Tixtla de Guerrero.— Alumnas y alumnos de la escuela Primaria Ignacio Manuel Altamirano en
Tixtla de Guerrero, pidieron a los docentes del turno matutino que abran las
puertas de la institución para que regresen a estudiar a las aulas que
recientemente fueron rehabilitadas por el gobierno del
estado.
Desde el lunes pasado, alrededor de 65 niñas y niños toman
sus clases afuera de esta escuela, debido a que los maestros de la mañana
cerraron con candado la puerta principal.
Estudiantes que en su mayoría asisten al turno vespertino
porque por las mañanas tienen que trabajar, dijeron sentirse tristes debido a
que prefieren estudiar en las aulas recientemente rehabilitadas que en la
incomodidad de las mesas plegables y bancos que utilizan desde hace una semana.
Marcos David Basilio Molina y Reyna Guadalupe Sánchez
Galán, son dos estudiantes que acuden a
esta escuela después de trabajar por las mañanas y lo hacen por sus ganas de
superarse y aprender cada día más.
"Queremos que nos dejen entrar porque nosotros queremos
estudiar", dice con mirada cabizbaja Marcos David Basilio Molina, que
ayuda en las labores de su casa a su mamá en las mañanas.
"Nos sentimos mal porque no nos deja entrar a la
escuela, el gobernador dijo que la escuela era para todos, no nada más para
ellos", señaló el estudiante de sexto año, Emmanuel Antonio Manzano
García, quien trabaja en una panadería.
Los padres de familia y los docentes encabezados por el
director de la escuela en el turno vespertino, Víctor Hugo Valle Vargas,
pidieron a los maestros del turno matutino a repensar su postura, pues
consideran que no dejar entrar a los alumnos a la institución es una cuestión
de discriminación y de violación a su derecho humano de estudiar.
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