Demandan empresarios que se integre la extorsión al catálogo de los delitos graves

En el marco de la toma de protesta de la Mesa Directiva del Consejo Coordinador Empresarial del Estado de Guerrero, el vicepresidente nacional de la Cámara Nacional de Comercio y Servicios Turísticos (Canaco-Servytur), Javier Saldívar Rodríguez, exigió al gobernador Héctor Astudillo

reforzar las acciones para brindar seguridad y a los senadores de la República, legislar para que el delito de extorsión se convierta en un delito grave.

Saldívar Rodríguez indicó que los empresarios son generadores de empleos, personas que aportan a la economía nacional a través de los impuestos y son el sector más golpeado por el cobro de extorsiones, por ello la exigencia de que este delito deje de ser considerado como menor y se haga una legislación para catalogarlo como grave.

“En todo el Estado de Guerrero vivimos ese lastre que es la extorsión, por eso hoy es tiempo de que levanten la voz como siempre, júntense, únanse y logremos que sea un delito mayor”.

Insistió en que el tema de seguridad debe ser atendido por los tres órdenes de gobierno; reconoció que se nota el gran esfuerzo que se ha hecho hasta el momento, pero sigue siendo insuficiente y esta es una situación primordial que lacera a todos los habitantes de Guerrero.

Públicamente pidió a los gobiernos estatal y federal para que los empresarios sean integrados a las mesas de seguridad porque necesitan estar enterados de lo que se hace, cómo se hace y por qué se hace y para también hacer algo por la seguridad. “lamentablemente nos han matado a muchos compañeros, a muchos ciudadanos, y eso no se vale”.

A los tres senadores que estuvieron en el evento, Félix Salgado, Nestora Salgado y Manuel Añorve, les exigió que legislen para que el delito de extorsión sea catalogado como grave y así se disminuya el lastre, en respuesta Nestora Salgado Romero dijo que se tiene que trabajar y que los testimonios de las personas sirven para ello. Dijo que la extorsión un problema que no debería existir y que es importante tener voces que digan basta. (Por Abel Miranda Ayala)