Suspendió el ISSSTE el programa de hemodiálisis para enfermos renales

Derechohabientes del servicio Médico que brinda el Instituto de Seguridad Social y Servicios para los Trabajadores del Estado (ISSSTE), protestaron afuera de las oficinas de la Secretaría de Bienestar Social, para exigir que se reactive el servicio de hemodiálisis para 72 pacientes que sufren

enfermedades renales.

“Están atentando contra nuestras vida, nos están condenando a morir sin atención”, señaló una de las mujeres que participaron en la protesta afuera del edificio donde despacha el delegado federal Pablo Amílcar Sandoval Ballesteros.

Los quejosos establecieron que desde hace meses fueron notificados que se les cambiaría la clínica que está prestando el servicio de manera subrogada debido a que en la actual, se tiene un conflicto de intereses porque el propietario es  esposo de la doctora que los atiende en el ISSSTE.

Los 72 pacientes indicaron que en la clínica “Especialidades Renales”, la mayoría de los pacientes ha tenido mejoría y consideran que están recibiendo una atención adecuada, por ello exigieron que el servicio de hemodiálisis lo sigan recibiendo en el mismo establecimiento.

“Nos dijeron que por decisión del gobierno federal se cambiaría la clínica por otra diferente y aun cuando no estábamos de acuerdo, aceptaríamos que nos trasladaran porque nos interesa seguir recibiendo atención, sin embargo ahora nos llegó un documento en el que informan que todo el servicio subrogado de hemodiálisis se ha cancelado”.

Estamos aquí para exigir primero que no se cancele y después que nos sigan manteniendo en la misma clínica donde casi todos los pacientes han mostrado mejoría.

Un servicio de hemodiálisis en el sector privado se cotiza entre los mil y mil 500 pesos, por ello sería imposible que los pacientes junten para pagar los tres servicios que reciben semanalmente.

“Nosotros dejamos toda la vida en el servicio, aquí hay maestros, burócratas y de todo tipo de servidores públicos que ya concluyeron su vida laboral y hoy les toca recibir atención en esta clínica”.

Los manifestantes lamentaron no haber encontrado en su oficina  al delegado del gobierno federal en Guerrero Pablo Amílcar Sandoval  Ballesteros para que  les diera la atención que merece su  demanda. (Por Abel Miranda Ayala)