Presunta estafa en los cajeros bancarios


Usuarios de cajeros automáticos en la capital del estado alertaron sobre la presencia de personas dedicadas a la estafa de cuentahabientes a quienes con trucos y engaños despojan de sus tarjetas y números confidenciales para vaciar sus cuentas.
El ataque se enfoca principalmente a adultos mayores o quienes se vean inexpertos en el manejo del cajero automático, estas personas son abordadas por los delincuentes quienes simulan ofrecer ayuda y al final se apoderan de los plásticos y números confidenciales.
El señor Jorge Eduardo González Balvanera, relató que el sábado al medio día acudió a la sucursal del banco BBVA Bancomer situada en la plaza cívica de Chilpancingo, cuando le tocó su turno para hacer unos del cajero un hombre, bien vestido le comentó que ese cajero presentaba problemas, que se pasara al siguiente, sin pensarlo lo hizo.
Cuando estaba por meter la tarjeta el individuo le comentó que primero limpiara el “chip” de la tarjeta porque de lo contrario podría tragársela y se acomidió a hacerlo, después él hombre introdujo el plástico y de inmediato el cajero indicó “tarjeta retenida”.
En ese momento intervino otra mujer que se encontraba en otro cajero y no dejaba de apuntar su celular para grabar el teclado del cajero automático, luego de sugirió a González Balvanera que diera retroceso a la máquina hasta llegar al punto en el que pide el “NIP”, lo marcaría y entonces le devolvería su tarjeta.
Viendo demasiadas coincidencias, el adulto mayor decidió no colocar su NIP y tomó el teléfono de atención al cliente y reportó lo que estaba sucediendo, ahí le inmovilizaron formalmente su tarjeta de forma que no pudieran utilizar la tarjeta que todo parece indicar que le fue cambiada al momento que el hombre se acercó a sugerirle que la limpiara.
“Mi tarjeta Ia desactivaron unos minutos después, sin embargo será hasta este lunes cuando pueda verificar en el banco si se hizo algún movimiento inadecuado con ella”, indicó el afectado, quien llamó a las autoridades y a las empresas bancarias a tener algún tipo de vigilancia y con ello impedir que vivales se aprovechen de quienes acuden a utilizar cajeros automáticos.
Cabe señalar que el intento de robo se registró al mediodía del sábado y cerca de ahí no había ningún policía ni personal de vigilancia del banco a quien poder pedir ayuda y así poder detener a los delincuentes. (Por Abel Miranda Ayala)

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