Dejan libre a Gonzalo Molina, dirigente comunitario de Tixtla
Tras 5 años y cuatro meses de prisión, el
dirigente de la Coordinadora Regional de Autoridades Comunitarias-Policía
Comunitaria (CRAC-PC) de Tixtla, Gonzalo Molina González, recuperó su libertad
este jueves al mediodía.
El líder comunitario se asumió como un
"preso político" y afirmó que detrás de las acusaciones que pesaban
en su contra estaba una campaña del gobierno del estado por desarticular a la
CRAC-PC en varias regiones de la entidad.
Poco después de las 10 de la mañana de ayer jueves, Gonzalo Molina fue notificado sobre la resolución absolutoria de una juez y dos horas más tarde quedó en libertad, siendo recibido en el acceso al penal por unos 50 familiares, activistas sociales y normalistas de Ayotzinapa, así como por Arturo Campos, quien también estuvo preso y era dirigente de la CRAC-PC en Ayutla.
Molina González agradeció el respaldo que
recibió a lo largo de esos más de cinco años y dijo que las autoridades
comunitarias en Guerrero son “legítimas, el gobierno debe respetar a los
pueblos originarios que han decidido organizarse".
Mostró a los presentes la Ley 701 sobre
Derechos y Cultura Indígena, a la cual, dijo, "le han quitado el espíritu
y el alma. Aun así, este nuevo gobierno sigue persiguiendo, (pero) los pueblos
hemos resistido durante más de 500 años y por eso debemos organizarnos y
unirnos".
Denunció que el gobierno impulsa proyectos que
atentan contra los pueblos originarios. "Hay un sistema voraz, egoísta,
ambicioso, que nunca se llena. Nuestros pueblos exigen que se respete la vida y
la naturaleza. No es con las armas como lograremos la transformación, las armas
de la CRAC son para defender a nuestros territorios, porque no podemos permitir
que se lleven a nuestras hijas o que desaparezcan a más estudiantes, como (el
caso de) los 43 normalistas".
Adelantó que encabezará “la lucha contra
aquellos que intenten despojarnos de nuestros territorios y de nuestros
recursos; estaré con el pueblo. Mi pueblo no está arrodillado, está de pie y
luchando. Fui un preso político y seguiré luchando por la transformación de
nuestro país".
La esposa de Gonzalo, Ausencia Honorato
Vázquez, agradeció por su parte el respaldo del Comité de Presos Políticos y
los Consejeros de la CRAC-PC, y anunció que darían la bienvenida a su esposo en
la base de El Fortín en Tixtla.
Por su parte, Arturo Campos señaló que como
pueblos originarios tienen derecho a organizarse, "y demandamos la
libertad inmediata de los presos políticos del país; no hay marcha atrás y
seguiremos resistiendo los embates del gobierno federal y estatal. Somos
inocentes y la lucha seguirá en este camino que hemos tomado".
(www.agenciairza.com)
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