Está a favor Sección 28 del SUSPEG de que se audite nómina del Ayuntamiento

Tras manifestarse en contra de la pretensión de los trabajadores extraordinarios del Ayuntamiento de Chilpancingo que mediante la toma del Palacio Municipal el lunes pasado exigieron las mismas prestaciones y montos salariales que tienen los sindicalizados, el dirigente de la Sección 28 del

Sindicato Único de Servidores Públicos del Estado de Guerrero (SUSPEG), J. Natividad Adame Martínez, dijo estar a favor de que la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHyCP) audite la nómina de la administración municipal para detectar las plazas laborales que no se justifican.

Entrevistado la mañana de ayer, el líder seccional suspegista expresó que como organización sindical propositiva que es, el SUSPEG está en la disposición de acompañar al presidente municipal, Antonio Gaspar Beltrán a la Ciudad de México a demandarle al gobierno federal mayores recursos económicos para el municipio de Chilpancingo y pedirle que lo incluya dentro del programa de rescate financiero.

En primer término, Adame Martínez fue cuestionado acerca de la manifestación que en días pasados hicieron los trabajadores extraordinarios del Ayuntamiento que para presionar a la autoridad municipal para que les otorgue las mismas prestaciones que tienen los empleados de base tomaron el Palacio Municipal.

Al respecto, el dirigente sindical dijo que todos los trabajadores tienen derecho a contar con buenos sueldos y prestaciones, sin embargo expresó también su desacuerdo con la pretensión de los empleados extraordinarios del Ayuntamiento capitalino.

“De que estos señores que son extraordinarios quieran igualarse con nosotros, pues es un error; nosotros tenemos más de 30 años de servicio y hemos ido escalando poco a poco; no es posible que vayan entrando y ya quieran ganar igual que uno que tiene más de 20 años, hay una incongruencia ahí”, remarcó.

Adame Martínez consideró que lo ideal es que la nómina del Ayuntamiento de Chilpancingo ya no siga creciendo, porque se agravará el déficit financiero que de por sí ya arrastra, el cual es de 15 millones de pesos mensuales, que junto con el de la Comisión de Agua Potable y Alcantarillado de Chilpancingo (Capach) se eleva a 20 millones de pesos.

Dijo que si la nómina del Ayuntamiento creció de manera desmesurada —tres mil 300 trabajadores— fue porque las administraciones municipales dejaron en sus plazas a quienes llegaron con ellos.

Con relación a la propuesta que les hizo el alcalde Toño Gaspar en cuanto a que lo acompañen a la Ciudad de México a presionar al gobierno federal para que rescate al Ayuntamiento de manera financiera y le otorgue mayores recursos, señaló que hasta el momento no ha habido de parte del primer edil un planteamiento formal en este sentido.

Sin embargo, resaltó que la Sección 28 del SUSPEG está en la mejor disposición de acompañarlo en esa gestión: “estamos puestos a ayudarle porque somos una sección sindical con trabajadores propositivos, no estamos aquí para crear problemas, al contrario tratamos de ayudar para que se resuelvan los problemas”.

Incluso, también dijo estar a favor de que la Secretaría de Hacienda audite la nómina del Ayuntamiento para que se detecten las plazas que no se justifican en la administración municipal.

Y es que expresó que “la verdad Chilpancingo es una ciudad de influyentes, porque hay mucha gente en el Ayuntamiento que no devenga sus salarios ni se presenta a trabajar, salvo los días 15 y 30 de cada mes a firmar sus respectivos recibos de pago”. (Baltazar Jiménez Rosales)