Piden organizaciones femeniles, respeto y congruencia al obispo Salvador Rangel

Representantes de organizaciones de mujeres, piden al obispo respeto y congruencia en sus declaraciones, “las mujeres han tenido que organizarse para defender sus derechos, y la Iglesia se quedó atrasada, considera a la agenda de género un riesgo, porque atenta contra todo el mandato que

tiene en un yugo a las mujeres”, afirman.

En reacción a las declaraciones que el lunes vertió el obispo Salvador Rangel Mendoza, en las que afirma que la agenda de género es un peligro y riesgo para la sociedad, Beatriz Eslava Borja, presidenta de la organización “Eslava Kaniche” expresó su desacuerdo, señaló que el clérigo, es incongruente con lo que pregona y hace, dice trabajar por la construcción de la paz en Guerrero, y con esa declaración, genera muchas emociones alejadas de la paz.

“Hay mujeres que venimos trabajando desde nuestras trincheras, y que se nos violente y se nos criminalice de esa forma, no estoy de acuerdo”, expuso la activista, agregó que hay mujeres que trabajan a favor del aborto porque hay gente que ha sido abusada, y no porque lo deseara, “el aborto no lo estamos proponiendo desde los matrimonios, no es así, y ya ha sido  legalizado, que haya quedado en letra muerta, no estoy de acuerdo, soy una mujer que trabaja y que construye”, recalcó.

Las mujeres han tenido que organizarse para defender sus derechos, trabajar en diferentes temas “y disculpen, pero creo a Iglesia, se quedó atrasada”, señaló Eslava Borja. Negó que, con este tipo de declaraciones, el obispo contribuya a la pacificación del Estado como lo pregona; además que con él, las mujeres no se sienten representadas, al contrario, se siente agredidas con sus declaraciones, ya se lo han hecho saber y sigue en la misma línea; subrayó que las mujeres no son invisibles, y trabajan porque les interesa contribuir a una reconstrucción total de la sociedad.

Erika Salinas Valadez, presidenta de la organización consideró que el prelado, sostiene una visión global como parte del sistema patriarcal obsoleto, en el que fue educado y formado; los países como Irlanda e Irak en los que el religioso comentó que ha vivido en los últimos años, son en los que la violencia hacia las mujeres es predominante, y no han realizado una construcción de paz en la que incluyan a las mujeres “y por supuesto que lo ve como un riesgo porque atenta contra todo el mandato que tiene en un yugo a las mujeres”.

A diferencia de la iglesia católica a la que pertenece el obispo Rangel Mendoza, los grupos amplios de mujeres, feministas, trabajan la construcción de paz con base en la tolerancia a la diversidad, la inclusión, respeto al pensamiento de cada una de las personas diferentes “todas y todos tenemos derecho pensar lo que queramos, el detalle es respetar el pensamiento que está enfrente, tenemos derecho a exigir pero también tenemos la obligación de respetar” dijo la activista.

Salinas Valadez pidió al obispo, respeto y congruencia; como persona pueda estar dijo, sentada junto a él y respetar su forma de pensar, aunque no la comparta, esto como parte de su madurez, libertad y autonomía como mujer, como ciudadana, “y es lo mismo que yo exijo a cambio, que se me respete”.

Agregó que la violencia hacia las mujeres no se va visibilizar en esta construcción de paz, sino “lo hacemos nosotras, ellos no nos lo van a dar”, los hombres como el obispo que está formado en un sistema patriarcal que ha predominado  por siglos piensan de esa manera, pero si las mujeres no lo visibilizan, no lo piden ni exigen, ellos –los hombres–, insistió, no lo van a  hacer, “él no ha sido congruente, con el hecho de pedir algo y no darlo”, acusó.

Afirmó que no todas las mujeres que apoyan el aborto, es porque lo han practicado, lo defienden como parte del respeto al derecho a decidir, por la toma de conciencia, por el derecho a ser o no ser madre y no por ello, se puede decir que han abortado. (www.notymas.com)