Ningún homicidio es justificable, dice el obispo Salvador Rangel


El obispo de la diócesis Chilpancingo-Chilapa, Salvador Rangel Mendoza, repudió que e Guerrero existan feminicidios, mismos que dijo la mayoría del as veces están originados por el machismo que persiste en Guerrero, además de algunos casos en los que las mujeres se encuentran en un lugar incorrecto.
El prelado estableció que la semana pasada se sacó de contexto una declaración que hizo en la que mencionó que algunas mujeres que fueron asesinadas no propiamente estaban en misa o en la catedral, sin que ello signifique una justificación al crimen, pues ningún homicidio es justificable.

"Estoy con las mujeres para apoyarlas y de ninguna manera estoy de acuerdo con los feminicidios".
Resaltó que en su anterior declaración le preguntaron ¿cuáles son las razones por las que hay feminicidios?, a ello respondí: "una de las razones es el machismo, que hay de parte de los varones en México y en otros lugares, también que había feminicidios porque muchas mujeres no andaban en el lugar correcto".
"Quise decir que las personas que asesinan son mujeres que trabajan en cantinas, en prostíbulos, de ‘halcones’, en el narcotráfico o mujeres que abiertamente ejercen la prostitución, claro muchas de ellas la hacen con mucha razón porque es la única manera que tiene de vivir".
Sin embargo insistió en que actividades como las antes descritas las convierte en mujeres altamente vulnerables instaladas en lugares peligrosos y por eso muchas veces se convierten en víctimas de feminicidio.
"Vale la pena reflexionar cómo tantas mujeres nuestras han muerto en accidentes estando en el lugar equivocado, yo apoyo a las mujeres y sobre todo desapruebo totalmente los feminicidios".
Destacó que de ninguna manera se justifica ninguna muerte, y se requiere defender la vida, "hay que aprovecharla vida y sobre todo hay que medirle, mucha gente está metida en lugares inconvenientes y vale la pena reorganizar nuestras vidas y caminar derechos lo más que sea posible".

Avanza pacificación en la sierra:

En el tema de la pacificación en la sierra, el obispo resaltó que se han logrado acuerdos para que la parte izquierda de Filo de Caballos empiece a normalizarse, de estos lugares ya fluye el transporte público, aunque lo hace a través de Chichihualco y no hacia la Xochipala como corría antes.
Donde aún se tiene un poco de conflicto es en la cabecera municipal de Tlacotepec donde no dejan salir a todas las Urvan, "vamos a seguir trabajando a ver si logramos que ya no asalten que no las estén quemando".
Indicó que en las reuniones que ha tenido con líderes de grupos que operan en estos lugares se les expone que a quien están perjudicando,  es a la sociedad en general.
"No pueden subir los maestros y los que suben llevan mucho miedo, no hay clases, los centros de salud cerrados, me pedían medicina para la sierra, el Estado tiene que responder algo porque tienen mucho tiempo sin atención". (Por Abel Miranda Ayala)

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