Por Chilpancingo y la gente de la Sierra Bety Alarcón quiere ser diputada federal

Por Baltazar Jiménez Rosales

 Con la confianza y seguridad de ganar de manera contundente el Distrito Electoral Federal 07, la candidata a diputada federal por los partidos Revolucionario Institucional (PRI), Verde Ecologista de México (PVEM) y Nueva Alianza (Panal), Beatriz Alarcón Adame, va con todo en estas dos semanas

y media que significan la recta final de las campañas de proselitismo en pos del voto popular.

Conformado por los municipios de Chilpancingo, Eduardo Neri (Zumpango del Río), Leonardo Bravo (Chichihualco) y General Heliodoro Castillo (Tlacotepec), estos dos últimos eminentemente sierreños, Bety Alarcón se siente identificada con los habitantes de la Sierra del Filo Mayor puesto que su familia es de Chichihualco y por eso siente un mayor compromiso y afirma que por lo complicada que es la demarcación es un reto para ella.

Sobre lo que le dice la población en el recorrido proselitista que hace, señala que cada municipio tiene su particularidad, pero en general, la petición es la misma: quieren mayores garantías de seguridad, vivir tranquilos y en armonía, que haya medicamentos, médicos y enfermeras en los Centros de Salud y escuelas dignas.

La situación, dijo es un tanto diferente en Chilpancingo, puesto que en sus 46 comunidades como en las colonias de la capital del estado existe un descontento generalizado, una marcada molestia y enojo, porque en Marco Antonio Leyva Mena no hizo nada y durante su administración no se realizó una sola obra en la zona rural del municipio “y tenemos que decirlo, porque es algo que estamos viviendo, en las visitas que hacemos a las comunidades, a las colonias. Existe el reclamo, el enojo, el descontento generalizado de la ciudadanía de Chilpancingo y de sus pueblos”.

Aun así, asegura,  le han patentizado su apoyo, porque nunca ha dejado de trabajar por la gente que menos tiene y porque gracias a su labor como directora del DIF-Chilpancingo, en las dos administraciones que encabezó el ahora gobernador Héctor Astudillo Flores, pudo trabajar y apoyar a los grupos vulnerables, como los Clubes de la Tercera Edad, los discapacitados, mujeres enfermas de cáncer y con aquellas que fueron golpeadas, vejadas y violentadas.

Y remarca: “cuando la política se hace con sensibilidad es cuando realmente le sirve a los ciudadanos. No tiene caso ser un político alejado de la gente que más nos necesita, la parte noble de la política es esa: estar con la gente. Se me ubica por el trabajo realizado en el DIF, por la parte sensible y es algo que siempre voy a hacer tenga algún cargo público o no”.

Por su apretada agenda de trabajo en estos días de proselitismo, la entrevista con Bety Alarcón se desarrolla tanto en su camioneta durante el traslado a su casa, en el barrio de la Santa Cruz, como en el kiosco de la hermosa plazoleta donde está su domicilio.

—A dos semanas de que concluyan las campañas, ¿cómo ha sentido a la gente?, se le pregunta.

—Ya tenemos caminando dos meses y medio y desde el inicio fue una campaña alegre, bonita, una campaña en donde yo puedo ver a la gente feliz y en sus rostros una gran esperanza en mi, en Bety Alarcón, lo cual me compromete y al mismo tiempo me da fortaleza para seguir en esa contienda.

—Un distrito muy complicado conformado por el municipio en el que está la capital del estado, pero además por otros tres que tienen su territorio en la Sierra.

—Un distrito sí algo complicado, pero yo lo prefiero ver como un reto y me siento feliz de representar a este distrito, porque mi familia está en la Sierra, está en Chichihualco, mis padres son de allá, mis abuelos, mis bisabuelos, toda mi familia es de allá, aunque yo nací en Chilpancingo, por eso estoy contenta de representar a Eduardo Neri, Chichihualco y Tlacotepec.

—¿Qué le dice la gente en su recorrido?, se le pregunta.

—En Chilpancingo hay un descontento generalizado porque no hubo un trabajo real por parte de la administración de Marco Antonio Leyva, pero lo que le hemos dicho a la gente es que los partidos no se equivocan, se equivocan las personas, ya que está en nosotros honrar la confianza que deposita nuestro partido y la ciudadanía al elegirnos como sus autoridades o servidores públicos y está en nosotros poder responder bien a esa confianza con trabajo, con responsabilidad, pero sobre todo con honestidad por amor a Chilpancingo.

Afortunadamente, indicó, el trabajo que realizó como diputada local en colonias y comunidades le ha permitido regresar y pedir el voto “con la frente en alto y me da gusto llegar a una colonia y decir estuve aquí el año pasado festejando el Día de las Madres, el Día del Niño, estuve entregándoles una calle pavimentada, la remodelación de la escuela. Afortunadamente puedo decir que trabajamos, pero sí hay enojo por parte de la gente, pero yo tengo mucha confianza en que el próximo primero de julio vamos a ganar, porque los candidatos del PRI y del PVEM y del Panal somos los mejores”.

—Y en la Sierra, ¿cuál es el sentir de la gente?

—Es diferente, en Zumpango, al igual que en Tlacotepec y Chichihualco, la gente tiene confianza en mi. Me siento contenta, porque veo buen ánimo de la ciudadanía.

Mencionó que en su recorrido por las colonias y comunidades de los cuatro municipios le ha insistido mucho a la ciudadanía que apoye con su voto a todos los candidatos priístas, “porque como diputada federal voy necesitar de un aliado que en este caso es el presidente de la República, para que yo pueda bajar recursos y por eso es importante que voten por José Antonio Meade,

—Hay buen ánimo, entonces.

—Muy buen ánimo, gracias a Dios, yo tengo claro que vamos a ganar la Diputación Federal, tengo esa confianza, se va a ganar de manera contundente.