Urbanización y desidia oficial, devastan el parque Omiltemi

*El titular de SEMAREN, Alan Ramírez Hernández, dijo que no en

 todas las comunidades hay voluntad para proteger los bosques.

Por Abel Miranda Ayala

A pesar de que este año ha sido uno de los peores en materia de estiaje en el manantial de Omiltemi, y esto se asocia con la deforestación registrada en los últimos años en el parque estatal Omiltemi, el secretario del Medio Ambiente y Recursos Naturales del Estado, Alán Ramírez Hernández, aseguró

que sólo trabajan para proteger el bosque en las comunidades donde la población por voluntad propia quiere protegerlo.

El funcionario reconoció que parte del problema de deforestación que se tiene en el parque estatal “protegido”, es la urbanización que ha tenido la zona con la introducción de carreteras y otros servicios, pues esto alienta al cambio de uso de suelo.

Señaló que como dependencia estatal dedicada al cuidado el ambiente, trabajan con los asentamientos humanos que son los poseedores, para que las áreas naturales protegidas sean voluntarias y de conciencia y no sólo por decreto, pues se ha demostrado que cuando se logra que las comunidades participan para conservar su biodiversidad porque es lo que les conviene, es cuando se tiene avances importantes.

"Estamos trabajando con las áreas naturales protegidas, pero con las que quieran declararse de manera voluntaria", dijo,  a pesar de que por tratarse de una zona protegida, el Gobierno del Estado debería  garantizar el cuidado del bosque, en las tres mil hectáreas que albergan una de las biodiversidades más importantes del país.

Cabe señalar que el manantial de Omiltemi abastece a Chilpancingo de casi la mitad del agua que llega a la población en temporada durante 8 meses del año, sin embargo en la temporada de estiaje el nivel del caudal disminuye de 180 litros por segundo a un tercio de ello, y este año de acuerdo con técnicos de la CAPACH el caudal se redujo a 40 litros por segundo.

La poca captación de agua en el manantial se asocia a la deforestación que se efectúa en la zona donde cada año, se estima, que se pierden cerca de mil hectáreas de bosque a las que se les cambia de uso de suelo para la vivienda o el cultivo agrícola, incluso para la siembra de enervantes.

En el parque de Omiltemi existen bosques de pino y encino, además de una amplia riqueza de flora y fauna, conociéndose 205 clases de hongos macroscópicos, 505 especies de plantas vasculares y 103 de orquídeas; y dentro de la fauna, 161 especies de mariposas, 39 de anfibios y reptiles, 130 de aves y 29 de mamíferos.

Sobre este parque existen estudios y diagnósticos de  entidades como la Universidad Nacional Autónoma de México que exigen que sea protegido para que se mantenga la captación de agua que se abastece a Chilpancingo, sin embargo las autoridades poco hacen para realmente proteger la biodiversidad en esta zona.