Periodistas de Chilpancingo solicitaron ayuda de la ONU


Periodistas de Chilpancingo, acompañados de líderes de organizaciones sociales y magisteriales, se manifestaron por calles de Chilpancingo y leyeron un documento frente al palacio de gobierno donde hicieron un llamado al representante en México del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para
los Derechos Humanos, Jan Jarab, para que intervenga ante violaciones graves que han sufrido en el desarrollo de su actividad.
La protesta tuvo como motivación la detención arbitraria de que fueron objeto dos reporteros el pasado domingo, por parte de policías comunitarios, cuando cubrían informativamente un accidente en el bulevar Chilpancingo-Petaquillas.
Los reporteros fueron esposados, despojados de sus pertenencias y llevados a la comisaría de Petaquillas, donde fueron liberados casi a la media noche y sólo ante la presión que realizaron sus compañeros que bloquearon la carretera y obligaron a las autoridades a acudir a dialogar con el grupo de civiles armados.
En el documento señalan, entre otras cosas que las acciones del gobierno de Héctor Astudillo Flores para garantizar la seguridad y castigar crímenes en esta entidad, “contradicen las recomendaciones de la asamblea general de la Organización de Estados Americanos (OEA) sobre el derecho a la Libertad de pensamiento y expresión, y la seguridad de los periodistas y trabajadores de los medios de comunicación en el continente", por ello la urgente necesidad de que la ONU intervenga para garantizar el derecho a la libertad de expresión.
Se cuestionó también la honorabilidad de la coordinadora ejecutiva del Mecanismo Estatal para la protección de defensores  de los derechos humanos y periodistas, María Elena Jaimes Martínez.
También cuestionaron a Rigoberta Román Orea, quien funge como Fiscal especializada para la investigación de delitos cometidos en agravio de personas que realizan labores periodísticas y defensores de derechos humanos.
Señalaron que… "además, los principios de la OEA y la Relatoría Especial para la Libertad de Expresión de la CIDH, recomendaron al gobierno de México poner en práctica estrategias y recursos que terminen con la impunidad prevaleciente en los crímenes contra periodistas, sin embargo esto ha sido letra muerta, pues se tiene decenas de casos en total impunidad.
Y concluyeron al señalar que… "los periodistas en México no podemos seguir bajo amenaza de los gobiernos, políticos, narcotraficantes, ni de ninguna expresión de los poderes fácticos. Por eso exigimos un freno a los ataques en contra de los compañeros y un fin a la impunidad que caracteriza a las agresiones contra periodistas, que se expresa casi en el cien por ciento de los casos". (Por Abel Miranda Ayala)

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