Pre-registros en la UAGro ¿Negocio de particulares?



Padres de familia de aspirantes a ingresar en escuelas de nivel medio superior de la Universidad Autónoma de Guerrero, denunciaron irregularidades en las plataformas digitales a las que tiene que acceder para hacer sus procesos de pre registro, registro y obtención de fichas, pues todo el tiempo
están saturadas y sólo en algunos establecimientos comerciales entran sin problemas.
Mónica López Arango,  madre de una joven que busca ingresar en la Preparatoria Número Uno, relató que el pasado 12 de febrero, intentó ayudar a su hija para que obtuviera el pre registro, y tras horas y horas de intentarlo con resultados que enviaban error, decidieron ir a la propia escuela a preguntar, cómo resolver el problema.
En la escuela el guardia de seguridad que se encuentra en la puerta de acceso, les dijo, no se compliquen la existencia, “vallan a la papelería de aquí al lado les cobran pero les hacen su registro en un par de minutos, ya son varias personas que han venido pero aquí nadie les puede resolver”.
La mujer se trasladó a la papelería que se encuentra en la calle Nicolás Catalán y efectivamente en menos de tres minutos el registro ya estaba elaborado y para ella tuvo un costo de 200 pesos.
Indicó que lamentablemente esos 200 pesos cubren sólo el trámite de pre registro, después tendrá que pagar otro tanto por el registro que se debe llenar el día 28 de febrero y después tendrán que obtener la ficha igual mediante las plataformas digitales que sólo funcionan para algunas personas o establecimientos “a los que desde la rectoría les proporcionan algún método o clave para ingresar”.
Lamentablemente, dijo que este gasto que están haciendo no garantiza el ingreso de los jóvenes a las escuelas, pues el registro sólo es una fase que se tiene que cumplir, después tendrán que participar en el examen de selección y ahí podrían ser rechazados ya que el número de aspirantes es mucho mayor a la capacidad que tiene la escuela para recibir alumnos.
“Nuestra inconformidad es que las plataformas no están funcionando correctamente y lejos de facilitar los procesos los están complicando y generando más gasto a quienes tenemos la ilusión de que nuestros hijos puedan estudiar y superarse”.  (Por Abel Miranda Ayala)

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