Esperan tortilleros “acuerdo” con gobierno para no incrementar el precio de la tortilla
El dirigente de los industriales de la masa y la tortilla en
la región Centro del estado, Abdón Hernández Olvera, insistió ayer que este
sector determinará la próxima semana si aumenta o mantiene el precio del
kilogramo de la tortilla, aunque esto dependerá del acuerdo al que lleguen con
el gobierno del estado, como ocurrió el año pasado que “entró en defensa de la
economía familiar.
Entrevistado la mañana de ayer, el empresario reiteró el
argumento que tiene este sector para aumentar el precio del kilo de la
tortilla, como el incremento en el costo de los insumos que utilizan como el
gas butano, la energía eléctrica, el maíz que llega de otros estados cuando se
termina la reserva del estado, la harina, pero además la “competencia desleal”
que significa la venta de “tortillas de mano”.
Hernández Olvera argumentó además que en otras entidades del
país el precio del kilo de la tortilla subió ya en dos y hasta tres pesos,
aunque insistió en que los industriales de la masa y la tortilla del estado
están a la espera del acuerdo al que lleguen con el gobierno estatal.
Y es que recordó que a principios del año pasado, ante la
oleada de incremento de precios que generó el llamado “gasolinazo”, el gobierno
de Héctor Astudillo Flores decretó en la entidad los Compromisos para la
Estabilidad y el Desarrollo de Guerrero, que además del recorte del salario de
los funcionarios de primero y segundo nivel, incluido el del propio mandatario
estatal, también incluyó la racionalidad en el gasto público y, con el fin que
los industriales de la masa y la tortilla no incrementaran el costo de su
producto impulsó un programa de subsidio para este sector que incluyó la
entrega de vales y cheques y la dotación de 800 toneladas de maíz.
Enfatizó que los empresarios de este giro han soportado los
incrementos de precios en los insumos que utilizan para la elaboración de su
producto, incluso del maíz que se trae de otros estados cuando se acaba la
cosecha de Guerrero, pero además señaló que la tonelada de harina de maíz el
año pasado registró un incremento del 20 por ciento.
Acusó además que los negocios de las “tortillas de mano”
significan una competencia desleal porque las propietarias de esos
establecimientos no pagan impuestos ni tienen los gastos que realizan los
industriales de la masa y la tortilla.
Indicó que los industriales de la masa y la tortilla
determinarán la próxima semana si incrementan o mantienen el precio del
principal alimento de los mexicanos, pero adelantó que en caso de que el
gobierno del estado no impulse alguna estrategia gubernamental como la del año
pasado, el aumento será mínimo, “porque siempre hemos actuado de manera
responsable y no queremos afectar la economía de los consumidores”, finalizó.
(Baltazar Jiménez Rosales)
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