Denuncian que la UPOEG desapareció a un joven ciudadano estadounidense
Denuncian la desaparición de ciudadano norteamericano, por
comunitarios de la Unión de Pueblos y Organizaciones del Estado de Guerrero
(UPOEG), de la comunidad de Palo Blanco, municipio de Chilpancingo, la familia
pide la intervención del gobierno del Estado para localizarlo.
Navarrete Blanco, madre de
Bryan Willy Rayón, dio a conocer que el joven es ciudadano
estadounidense por nacimiento, radica en Santa Anna California, y vino de
vacaciones, desde el pasado 1 de diciembre, a la comunidad de El Ocotito, donde
ella radica. El día de su desaparición, venía a bordo de un taxi del servicio
público, con rumbo a Petaquillas, donde vive su esposa.
De acuerdo a la versión del taxista, según narró la
denunciante, al llegar a la comunidad de Palo Blanco, el grupo de comunitarios
que mantienen el retén carretero, pararon la unidad y se acercaron del lado del
que viajaba el joven, a quien le dijeron que se bajara, este les respondió que
para que, que no habría cometido ninguna falta, los comunitarios lo obligaron a
descender, por lo que el taxista orilló el auto para esperarlo, cuando los
comunitarios, le dijeron que mejor se fuera.
Varios testigos, dijo la señora, le han confirmado que
vieron a su hijo en el campamento de la UPOEG de Palo Blanco, sin embargo,
desde el sábado por la noche, no sabe nada de él, a pesar de haber acudido al
campamento, donde el comandante al que solo sabe responde al nombre de
“Diógenes”, aunque al parecer su verdadero nombre es “Benito”, le ha dicho que
no lo tienen.
Navarrete Blanco, refirió que desconoce si la desaparición
de su hijo, está relacionada con el asesinato de su esposo, Marcelino Anota
López, quien también perteneció a la UPOEG del grupo de Mohoneras, desapareció de su base, el pasado 30 de mayo,
y fue encontrado muerto, al día siguiente, en la comunidad de Dos Caminos.
La denunciante, dio a conocer que ha interpuesto la denuncia
correspondiente ante la Agencia del Ministerio Publico (MP), y la embajada
norteamericana. Pidió la intervención del gobierno para dar con el paradero de
su hijo, “yo le pido al gobierno que interfiera para que me den razones de mi
hijo”, dijo con lágrimas en los ojos. A los comunitarios les pidió “que me
entreguen a mi hijo, si en verdad cuidan del valle, mi hijo no tiene ninguna
culpa”.
Agregó que, al momento, ha tenido que abandonar su casa en
Ocotito, por temor a ser agredida también, incluso, dijo, sacó a su hijo más
pequeño, por miedo a que también sea agredido. (NOTYMAS)
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