Denuncian que el edificio de un kínder fue dañado por el sismo

Padres de familia, maestros y alumnos del Jardín de Niños “Aarón M. Flores”, ubicado en la colonia Anáhuac, bloquearon la circulación en la carretera a Tixtla para demandar la reconstrucción de su edificio que por agrietamientos que presenta fue dictaminado como zona de alto riesgo y con el reciente sismo de

8.2 Grados en escala de Richter el problema se ha agudizado.

"Lamentablemente Protección Civil, no nos tomó en cuenta en las revisiones que se hicieron posteriores al sismo, pues hasta el momento ningún representante de esa institución se ha presentado para evaluar los daños", indicó la directora del plantel Elizabeth Gallardo Chávez

Agregó que el edificio tiene 33 años que fue construido y por el deterioro que tiene se presentaron cuarteaduras por las que en un dictamen emitido en el mes de julio se indica que uno de los edificios tiene un alto riesgo, el otro fue considerado de riesgo medio, sin embargo en este momento los dos podrían colapsarse porque los agrietamientos se ensancharon con el terremoto de hace unos días.

Los quejosos se colocaron justamente en el punto conocido como el crucero de la INDECO, y con ello impidieron el flujo vehicular entre Chilpancingo y Tixtla, situación que se complicó debido a que el libramiento de cuota, también se encontraba cerrado por el enfrentamiento que hubo entre policías y normalistas de Ayotzinapa, esto obligó a que los automovilistas buscaran vías alternas por accesos al libramiento que se tiene desde la Colonia Cuitláhuac o por el Tomatal.

En esta institución se cuenta con una matrícula de 105 alumnos, distribuidos en cinco grupos, y en todas las aulas se tienen problemas de cuarteaduras, por ello es que los padres de familia fueron quienes tomaron la iniciativa de hacer el bloqueo para que la institución no pase desapercibida, "nosotros no tenemos ningún interés en afectar a terceras personas, pero necesitamos que alguna autoridad nos tome en cuenta", dijeron.

La directora aseguró que han entregado oficios en todas las instancias posibles para pedir que se revisen sus edificios y se les hagan las reparaciones o remodelaciones necesarias para que se garantice su estabilidad, y la seguridad de maestros y alumnos "… por lo que percibimos se tiene que demoler y construir un nuevo edificio, pero eso lo decidirá la autoridad competente en base a los dictámenes estructurales que hagan al edificio".

Finalmente dijo que los padres de familia se reunirán y tomarán la determinación de si sus hijos entrarán al edificio en las condiciones que actualmente está o se toma otra determinación, "finalmente son sus hijos quienes tiene el mayor riesgo y por eso es que están participando en esta protesta". (Por Abel Miranda Ayala)