“Chilpanbaches” recobra su apodo gracias al MAL ejercicio del alcalde

Baches de hasta 40 centímetros de profundidad se pueden encontrar  en la mayoría de las calles de Chilpancingo, estos se han generado debido a las recientes lluvias y a la pésima calidad con que fueron cubiertos el año pasado, pues el material que les colocaron se despegó, lo que repercute negativamente 

para los autos que circulan en esta capital.

Las laterales del bulevar Vicente Guerrero a la altura del puente de La Avispa se encuentran severamente afectadas y ahí los baches tiene más de 40 centímetros de profundidad y más de un metro cuadrado de tamaño, por lo que decenas de autos caen diariamente en el agujero, causando daños a la suspensión del vehículo.

David Carbajal Emigdio, un trabajador de servicio público de transporte en la modalidad de taxi, indicó que en este lugar ha visto a personas a las que se les poncha las llantas y a otros a cuyos vehículos se les quiebran las rótulas porque el bache es enorme y cuando llueve se llena de agua y no se nota.

“En lo personal caí dos veces, ahora ya me lo aprendí y sé que debo tomar el otro lado de la calle, igual frente a la tienda Coopel donde el bache es igual de profundo y de manera permanente está cubierto de agua”.

El transportista, señaló que quienes viven trabajando en las calles no tiene más remedio que aprenderse la ubicación de los baches para no caer en ellos, porque esperar a que las autoridades los reparen es algo que sabemos que no pasará pronto.

El año pasado el gobierno municipal anunció un programa de bacheo, con el que se repararían las calles y avenidas de la ciudad, sin embargo sólo fueron muy pocas las vialidades en que se completó este trabajo y en algunas sólo se limpiaron los baches y se dejaron sin ponerles el chapopote.

Además de que los parches que se colocaron en la mayoría de los lugares se volvieron a levantar y por eso este año los agujeros son mucho más grandes que el año pasado, además de que en este año las autoridades no han anunciado si se aplicará algún programa emergente. (Por Abel Miranda Ayala)