Piden justicia para 2 normalistas que murieron atropellados hace tres años



Alumnos de la Escuela Normal Rural “Raúl Isidro Burgos” (Ayotzinapa), se manifestaron en esta capital como parte de una jornada de lucha para recordar y exigir justicia, para dos de sus compañeros que murieron atropellados hace tres y medio años, en la carretera de la Costa Grande.
Los normalistas demandaron a la Fiscalía General del Estado que no dé “carpetazo” a este asunto, que se castigue al chofer que no detuvo un tráiler cargado con maquinaria pesada y arrolló a los normalistas que, atravesados en el camino, "boteaban", para recaudar fondos, en la carretera federa a la altura del municipio de Tecpan de Galeana.
Los fallecidos en ese accidente fueron: Freddy Fernando Vázquez Crispín y Eugenio Tamarit Huerta, mientras que los estudiantes José Bartolo Leyva Baltazar, Eder Yahir Pérez Serafín Y Luis Enrique Jiménez, resultaron lesionados.
El vocero de los normalistas dijo que ellos están convencidos de que no se trató de un accidente sino de un hecho premeditado contra sus compañeros.
Agregó que las familias de estos jóvenes que murieron atropellados y los que resultaron lesionados no han recibido  justicia, no se les ha reparado el daño y no se ha dictado una sentencia en contra del conductor Benjamín Torres Salgado, quién manejaba un tracto camión que impactó a los normalistas el 7 de enero de 2014.
Los normalistas alrededor de 50 estudiantes de Ayotzinapa se concentraron en el monumento a las banderas para su manifestación, de ahí partieron en marcha hasta el zócalo de la ciudad donde realizaron un mitin político en el que se demandó justicia para los caídos.
Aclararon que el conductor del camión, no se encontraba en estado de ebriedad, ni bajo la influencia de estupefacientes, por lo ellos deducen “que actuó dolosamente en contra de los alumnos de la normal”, después huyó con la intención de deslindarse de su responsabilidad.
Los estudiantes demandaron al juez que atiende el caso que en su sentencia tome en consideración “todas las agravantes que existen en este caso”. (Por Abel Miranda Ayala)

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