No debe cancelarse el Acamoto: E. Rodríguez

Tras expresar categóricamente que en Guerrero son bienvenidos todos los turistas, el titular de la Secretaría de Turismo en la entidad, Ernesto Rodríguez Escalona se pronunció por la no cancelación del llamado Festival Acamoto.

El funcionario estatal destacó que el Acamoto es un evento que se lleva a cabo en Acapulco desde 1991 en mayo de cada año, por lo cual señaló que lo único que se debe de hacer es regularlo para que quienes participan en él no violen las leyes, que no secuestren la principal vialidad del puerto, que es la Costera Miguel Alemán y que no incurran en actos vandálicos.

Rodríguez Escalona quiso dejar en claro que es un privilegio y un honor que la gente escoja los destinos turísticos de Guerrero para pasar sus vacaciones o simplemente los días de descanso que tengan.

No obstante sí enfatizó que todos los visitantes tienen que cumplir la ley y en esto van incluidos los motociclistas que participan cada año en el Acamoto, ya que a nadie le gusta que cometan actos vandálicos como los que se registraron el pasado fin de semana en Acapulco cuando incluso llegaron a saquear una tienda de conveniencia ubicada en plena Costera.

“Lo que no queremos los guerrerenses es que cometan actos vandálicos, porque nosotros los estamos recibiendo con cariño y les abrimos las puertas”.

En este sentido, si bien se pronunció porque el Acamoto no sea cancelado, el secretario de Turismo dijo que para los próximos eventos de este tipo debe de haber una mayor coordinación de esfuerzos entre los tres órdenes de gobierno

Enfático agregó que el Acamoto debe seguir llevándose a cabo en Acapulco, “pero en orden, cumpliendo todos lo que marca la ley y los reglamentos de Tránsito”, y que cumplan con las medidas de seguridad personal para evitar accidentes.

Reconoció que lo que ocurrió en la edición de este año del Acamoto encendió los “focos rojos”, por lo que insistió en que “todos tenemos que prepararnos y organizarnos porque es importante que vengan, porque están viniendo desde 1991 cuando se realizaba el Festival Acapulco, y ya se hizo una tradición”. (Baltazar Jiménez Rosales)