CAPACH han abierto tres veces en 6 meses la calle Altamirano
Por tercera vez en menos de seis meses la
Comisión de Agua Potable y Alcantarillado de Chilpancingo abrió el pavimento en
la esquina que forman las calles Altamirano y Baltazar R Leyva Mancilla en
pleno centro de la ciudad para reparar fallas que ellos mismos provocaron pues
resulta que en la ocasión anterior se les
olvidó conectar un tubo que conecta
la línea de agua a la calle Colón.
Los trabajadores de la CAPACH iniciaron los
trabajos el pasado jueves por la tarde, cuando abrieron el pozo a media calle y
colocaron cintas indicadoras de peligro, con ello cerraron el paso vehicular en
la calle Baltazar R Leyva y limitaron a un sólo carril en la Altamirano.
A pesar de que esta acción genera un
asentamiento y complicaciones en la vialidad, los trabajadores de la CAPACH no
regresaron ayer viernes al sitio, mismo que permaneció abierto y abandonado.
Vecinos de la zona indicaron que los trabajadores
les confirmaron que se tuvo que abrir nuevamente el pozo porque se les “olvidó”
conectar un tubo que conecta el suministro de agua a la calle Colón, en la
parte baja y no dieron ninguna explicación del motivo por el que dejaron la
obra abandonada durante todo el viernes.
Los vecinos confirmaron que, en el último año,
esta vialidad ha sido abierta en tres ocasiones para hacer la misma reparación,
pues se tenía un problema de que no estaba fluyendo agua en las tuberías
supuestamente porque hubo un taponamiento como consecuencia de la acumulación
de sarro.
Meses después se abrió porque la reparación
quedó mal y se produjo una fuga y ahora resulta que no conectaron uno de los
tubos y por ello hubo que volver a realizar obras que son muy molestas porque generan
caos vehicular, ello sin sumar el costo al erario público.
“Para nosotros es muy molesto estar escuchando
a los automovilistas que se detienen y están pitando, los clientes de los
negocios no pueden llegar a comprar y simplemente ver que tiran el dinero de
nuestros impuestos de esta manera tan sin sentido nos genera rabia e
impotencia”, indicó Eleazar Cabrera Hernández un vecino de esta zona de la
ciudad. (Por Abel Miranda Ayala)
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