Alcalde de Tixtla “le pide peras al olmo”: que MAL sea humilde
El alcalde de Tixtla, el perredista
Hossein Nabor Guillén, rechazó que su oposición a la instalación de un relleno
sanitario (basurero) en el punto conocido como Matlalapa, en su municipio, para
el destino final de la basura de Chilpancingo se haya politizado, como asegura
su homólogo capitalino Marco Antonio Leyva
(MAL).
"Yo entiendo la desesperación
en la cual se encuentra (MAL), pero decir que el Ayuntamiento de Tixtla es el
responsable de lo que está pasando (en la capital) es lo más cómodo", dijo
en entrevista.
Añadió que el Cabildo de Tixtla
“sólo ha defendido la postura de los tixtlecos" y que el error de Leyva
Mena fue "no dimensionar" la magnitud del problema de la basura en
Chilpancingo.
"Tenemos allí a la Normal de
Ayotzinapa, la Policía Comunitaria, a la parte más radical de la CETEG, la
Asamblea Popular; entonces estos movimientos sociales se declararon a favor de
la comunidad de Matlalapa", para que no se depositara ahí la basura de
Chilpancingo, indicó.
Invitó a Leyva Mena a que a
"replantear el problema" si realmente tiene "ánimo de
diálogo" para buscar un terreno alterno en la zona limítrofe entre ambos
municipios.
Nabor Guillén refirió que pese a la
crisis sanitaria y de contingencia ambiental que enfrenta la capital por el mal
manejo de la basura, no ha sido convocado a dialogar para buscar una solución
conjunta.
"Si hubiera diálogo buscaríamos
alguna otra opción, hay otras propuestas que pueden ser analizadas. Lugares
intermedios entre Zumpango, Chilpancingo y Tixtla que puede remediar un poco el
problema.
“En Chilpancingo tampoco ha habido
una comunidad que diga que está de acuerdo en aceptar que en sus tierras se
abra el relleno sanitario", dijo.
Agregó que si el alcalde de
Chilpancingo se olvida de la "confrontación y asume una postura humilde,
no de soberbia, sino de humildad ante este problema tan grave, estaremos
prestos y lo haremos con todo gusto", aseguró.
Nabor recordó que la Comisión del
Medio Ambiente del Congreso local, después de reunirse con los tres alcaldes,
emitió un punto de acuerdo dándole la razón al Cabildo de Tixtla en el sentido
de que el terreno de Matlalapa no tenía sustento legal, además de que no cuenta
con estudios de impacto ambiental, de acuerdo con la Norma Oficial 085 de la
Secretaría del Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat). (www.agenciairza.com)
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