Leyva: es ilegal el cambio de comisario en El Ocotito

El gobierno del alcalde Marco Antonio Leyva (MAL) desconoció la asamblea comunitaria de El Ocotito en la que se aceptó la licencia de Audifret Benítez Visoso para dejar la Comisaría, y en su lugar nombraron al maestro jubilado Gil Ramírez Cortes y, además,  advirtieron que podrían desarmar a la policía comunitaria

que opera en ese poblado del municipio de Chilpancingo.

El domingo en El Ocotito hubo una asamblea comunitaria donde se informó de la decisión de Benítez Visoso de dejar el cargo y huir de ese poblado porque teme por su seguridad y la de su familia, tras ser retenido y amenazado por integrantes del Frente Único al Servicio del Desarrollo del Estado de Guerrero (FUSDEG), y en su lugar se nombró a su suplente, Gil Ramírez.

Este martes, Marco Antonio Leyva, en entrevista y respecto a la separación de Benítez Visoso de la Comisaría, restó importancia a la asamblea del domingo: "No tiene ninguna validez esa asamblea y se le informó a ambos grupos que no iba a tener validez hasta que el Cabildo sesionara y se determine quién va a asumir el cargo de comisario; cualquier acto que puedan hacer, la firma de manera jurídica no tiene los efectos legales procedentes, y van a caer en una sanción de tipo administrativo y puede que hasta de tipo legal", señaló.

Agregó que la licencia del ahora ex comisario se debió a que "ya tenía una fuerte presión por parte de ambos grupos y, de acuerdo a la información que tengo, es que se había asumido como parte de un grupo, presiones internas de su propio grupo y presiones del otro grupo del FUSDEG; obviamente eso en un hombre que había estado trabajando de manera normal, de repente se encuentra en este tipo de tensiones hace sus propias valoraciones personales y decide retirarse".

Luego, el alcalde priista dijo que ese "es un problema de carácter federal por el tipo de armas que tienen, es un problema de carácter estatal porque el corredor que tiene el FUSDEG obliga a que la autoridad estatal intervenga, y es municipal, porque gran parte de ese problema está asentado en Chilpancingo”.

Indicó que “lo que estamos haciendo los tres órdenes de gobierno, de manera coordinada, estamos platicando, conversando, la posición del gobierno de los tres órdenes; de alguna manera nosotros podamos tener rápidamente una política donde instrumentar y reglamentar esta policía comunitaria y no hacer que vivamos en un estado de tensión todos".

Finalmente, afirmó que "el desarme (de esa policía comunitaria), es una posibilidad, pero la mayor posibilidad es regularizar esta policía comunitaria que no puede tener ese tipo de armas, no puede violentar los derechos humanos, que de alguna manera no podemos vivir en un estado de tensión con ellos”. (www.agenciairza.com)