Habitantes de Tierra Colorada piden acuerdos entre UPOEG y FUSDEG



Ayer  viernes al mediodía unos 300 pobladores del municipio de Juan R. Escudero (Tierra Colorada) realizaron una marcha del crucero de Ayutla hacia el Ayuntamiento, para exigir a los integrantes de la Unión de Pueblos y Organizaciones del Estado de Guerrero (UPOEG) y del Frente Unido por la Seguridad y el
Desarrollo Social en Guerrero (FUSDEG) que detengan las hostilidades entre ellos.
La protesta es a raíz del enfrentamiento que el pasado lunes por la madrugada sostuvieron en la comunidad de Tlayolapa, de este municipio, donde hubo un saldo de siete muertos y cinco heridos.
Esta marcha denominada "Por la Paz" partió del crucero de la carretera federal Tierra Colorada- Ayutla de los Libres y culminó con un mitin frente al Ayuntamiento.
Ahí, el regidor del partido de Movimiento de Regeneración Nacional (Morena) Inocencio Alvarado Ramírez, pidió a los comunitarios de los dos grupos de autodefensa a que delimiten los territorios en que operan, que cada grupo se retire del lugar donde está el bando contrario, para evitar nuevos choques.
"Los dirigentes e integrantes de ambas organizaciones deben de entender que esto no es una guerra y que deben de buscar las vías de paz", afirmó.
Este jueves a las diez de la noche los pobladores de esta demarcación bloquearon durante más de tres horas la Autopista del Sol para exigir al gobierno del estado su intervención, a fin de que realice una mediación entre los dos grupos de autodefensa para evitar una nueva confrontación.
Tras los hechos de este lunes, la Secretaría de Seguridad Pública Estatal envió 200 policías estatales que realizan patrullajes en las localidades de El Ocotito y Tierra Colorada, zona de conflicto entre la UPOEG y el FUSDEG.
Y es que los dirigentes de ambos grupos, Salvador Alanís, del FUSDEG y Bruno Plácido Valerio, de la UPOEG, amenazan con nuevos enfrentamientos.
Ambos grupos se acusan de estar vinculados con la delincuencia organizada.
El gobierno estatal reconoce que la situación sigue bastante tensa pero que será el gobierno federal el que decida si desarma a los policías comunitarios, debido a que por sus diferencias han provocado que la ciudadanía viva en una constante zozobra.
Desde el lunes la Secretaría de Educación en Guerrero (SEG) suspendió las labores docentes en las escuelas de educación básica de la zona.
Por su parte, la Secretaría de Seguridad Pública detectó que algunos policías comunitarios de ambas organizaciones portan armas de uso exclusivo del Ejército y la Armada de México, como AK-47 y AR-15, las que han sido letales cuando se han sucedido enfrentamientos entre los grupos. (www.agenciairza.com)

Comentarios