SEDATU demolerá otras 29 viviendas por irregularidades en su construcción

*Cada una de las casas que serán demolidas
tuvo un costo de al menos de 200 mil pesos,
dijo el delegado José Manuel Armenta Tello. 

Otras 29 viviendas construidas para damnificados serán demolidas en la comunidad de Papagayo, municipio de Juan R. Escudero (Tierra Colorada), debido a que fueron edificadas en una zona inestable y utilizaron un modelo inadecuado, informó el delegado de la Secretaría de Desarrollo
Agrario Territorial y Urbano (SEDATU), José Manuel Armenta Tello.
Las viviendas se suman a las 32 que habrán de demoler en el predio El Mirador en Chilpancingo, las cuales hasta el momento no han sido entregadas, pero ya presentan daños estructurales.
“Las casas se hicieron en un lugar que no deberían de haberse construido y además con un sistema de construcción inadecuado (…) la empresa se tiene que hacer responsable. Nosotros ya dimos un predio seguro, donde la población estuvo de acuerdo”.
Explicó que el sistema de construcción que implementaron lleva por nombre palafitos: “se construyeron con una base de madera, es para zona inundable y estas condiciones de que estén sobre madera (las casas están suspendidas en el aire sostenidas sobre nueve horcones de madera y una base de cemento) les permite hasta cierta temporada del año contacto con el agua sin que se dañe la estructura”.
Sin embargo, reconoció que la zona donde fueron construidas las viviendas, “no es la adecuada, no es adecuada la solución que se dio y entonces las viviendas se van a reubicar y se van a construir en otro lugar”.
Las familias afectadas se negaron a usar las viviendas, por considerar que eran de mala calidad y la empresa constructora no las concluyó al 100 por ciento.
“Las casas ahí están, te metes y son inestables, son viviendas que se mueven y la verdad se mueven porque es un sistema de construcción que no es el adecuado para la zona”.
Sobre las declaraciones del ex delegado de le SEDATU, Vicario Castrejón, quien se deslindó de los daños que presentan las viviendas construidas cuando él estaba al frente de dicha dependencia.
“Yo no soy abogado, soy ingeniero, pero no sé en qué momento  en un deslinde de responsabilidades quienes es o hasta que tanto eres responsable. Yo no seleccione el predio, yo no decidí su construcción, así que el menos responsable soy yo”.
A pregunta expresa, si ya había buscado a Vicario Castrejón, Armenta Tello, respondió que no, y no tiene nada que hablar con él.
Cada una de las viviendas que serán demolidas tuvo un costo de por lo menos de 200 mil pesos, dijo el delegado federal.
La SEDATU ya adquirió un nuevo predio, donde habrán de construir de nueva cuenta las 29 casas y los vecinos exigieron que su edificación se haga con el modelo tradicional.
Las viviendas fueron construidas para las familias que perdieron sus casas por el desbordamiento del río Papagayo, tras el paso de la tormenta Manuel y el Huracán Ingrid en septiembre del 2013. (NOTYMAS).

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