No fueron tantos los asistentes ayer a la marcha del magisterio

Apenas unas mil personas participaron en la "marcha estatal masiva" convocada por la Coordinadora Estatal de Trabajadores de la Educación en Guerrero (CETEG) y otras organizaciones sociales, con la que se repudió la reforma educativa y se demandó la presentación con vida de los 43 desaparecidos
de Ayotzinapa.
La marcha inició alrededor de las 12 del día y de acuerdo con la información previa que proporcionó la dirigencia de la CETEG este día se concentrarían miles de maestros de todo el Estado que también paralizarían las actividades en las escuelas, sumados al paro nacional magisterial.
El grupo más numeroso que se notó en la marcha de este día fue el de los maestros estatales que se aglutinan en la sección 18 del SUSPEG, mismos que desde hace unos días anunciaron que toda la sección estaba en pos de apoyar el movimiento magisterial que tiene la intención de derogar la reforma educativa.
La marcha inició en la avenida Rufo Figueroa, frente a las instalaciones del Ex INEBAN, después avanzó por las laterales del bulevar Vicente Guerrero, a la altura de la tienda Sam's  se colocaron en los carriles de alta velocidad, y por ellos llegaron hasta el Parador del Marqués, sitio que ya estaba resguardado por antimotines de la Policía Federal, corporación que desde días atrás notificó que no se permitirían bloqueos sobre las carreteras federales o la autopista.
A pesar de la advertencia, los maestros decidieron detenerse en este punto a realizar un mitin político que duró aproximadamente una hora —los policías permanecieron sólo observando—, "estamos haciendo uso de nuestro estricto derecho a la manifestación y libre expresión de la ideas, sin violar ningún derecho de persona alguna", vociferaban desde el micrófono.
Cabe señalar que durante el tiempo que duró el mitin los vehículos pudieron transitar usando como vía alterna el encauzamiento del río Huacapa de tal forma que nunca se suspendió totalmente la circulación.
En su discurso el dirigente de la CETEG Ramos Reyes Guerrero “machacó” que el magisterio de Guerrero no se amedrenta con las amenazas de descuentos y despidos, "el magisterio de Guerrero seguirá luchando por mantener las conquistas laborales que se ganaron desde el siglo pasado y de las que el gobierno de Peña Nieto trata de despojarnos", dijo.
Agregó que en la Ciudad de México se instaló el plantón de la CNTE y llamó al gobierno federal a que atienda la exigencia de sentar una mesa de trabajo y se resuelvan las exigencias, que en primer lugar mantiene la demanda de presentación con vida de los 43 desaparecidos de Ayotzinapa, y por supuesto la derogación de las reformas estructurales que (en su opinión)  mucho daño le están haciendo al país. (Por Abel Miranda Ayala)

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