El desastre en que HAF recibió Guerrero es producto de negligencias pasadas: Capella
Después de declarar que nunca es tarde para revertir la
situación de violencia que vive Guerrero, el comisionado de Seguridad Pública
del estado de Morelos, Jesús Alberto Capella Ibarra, expresó categóricamente
que no se puede culpar al gobierno de Héctor Astudillo Flores por el problema
de
inseguridad, ya que “el desastre en que recibe la nueva administración
estatal es producto de lo que no se hizo en el pasado”.
El alto funcionario morelense fue entrevistado el mediodía
de ayer al término de la firma del Convenio Específico de colaboración
Interinstitucional de Seguridad Pública en Materia de Control y Confianza entre
Guerrero y Morelos”, en la cual sí reconoció que en ese vecino estado hay
preocupación por los altos niveles de violencia registrados en esta entidad.
Cuestionado directamente acerca de si todavía es posible
revertir los niveles de violencia que se registran en Guerrero, Capella Ibarra dijo
que ninguna entidad del país “está en un proceso ya perdido para recuperar su
paz y tranquilidad y en el caso de Guerrero es una entidad muy importante
social, cultural, histórica y turísticamente, que lamentablemente está
sumergida en una situación de violencia”.
“El desastre en que recibe la nueva administración estatal
es producto de lo que no se hizo en el pasado, entonces no se puede
responsabilizar en unos cuantos meses a un gobierno estatal o a un municipal
cuando el proceso de violencia se construyó durante muchísimo tiempo”, expresó
categóricamente.
Y agregó: “yo estoy convencido, y debo de reconocer y
admirar la determinación que ha tenido el gobernador Héctor Astudillo para
entrarle a este proceso, he tenido la oportunidad de dialogar en muchas ocasiones
con él, sé de la determinación que tiene en resolver éste proceso, y de la
voluntad demostrada en los hechos del gobierno federal de apoyarlo”.
Por lo anterior, consideró que con estos elementos, con la recomposición
de las instituciones y con el establecimiento de las estrategias adecuadas, “yo
creo que Guerrero estará del otro lado”.
En este sentido añadió que los principales elementos para
que las cosas funcionen y cambien en regiones o en entidades son “la participación
activa de la ciudadanía, la voluntad política de quien gobierna, y estoy
convencido que aquí tienen esas dos primeras partes y la tercera que es la
renovación, que es precisamente parte del convenio que estamos firmando
ahorita, que implica la capacitación y la evaluación que es la parte más
complicada”.
Insistió en que el tema de la seguridad pública “es un
proceso inacabado porque siembre habrá manzanitas que traigan otra visión de
las cosas, y más cuando se tienen décadas de descomposición institucional y
social”.
Reconoció que en Morelos hay preocupación por los niveles de
violencia que hay en Guerrero “porque lo que impacta en Guerrero nos pega en
Morelos, sobre todo porque Guerrero es un estado geográficamente más grande con
un nivel de habitantes mucho más grande que el nuestro, y una relación social y
cultural.
Además, dijo que hay guerrerenses que radican en Morelos “y
eso evidentemente nos impacta profundamente; sabemos del intercambio de
información de muchos delincuentes que cometen fechorías aquí y se van para
allá, y eso requiere de un trabajo institucional como el que se está generando
en este momento”. (Baltazar Jiménez Rosales)
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