Avala alcalde que Obispos busquen diálogo con grupos delincuenciales

El presidente municipal de Chilpancingo, Marco Antonio Leyva Mena, señaló que de manera personal su investidura como autoridad le impide sentarse a dialogar con grupos de la delincuencia, pero consideró positivo que una autoridad como el obispo pudiera hacerlo para “moverles su espíritu,
su buena fe y su conducta”.
El primer edil fue entrevistado luego de encabezar la presentación de la Feria del Pozole y el Mezcal sobre la situación de inseguridad que prevalece en esta capital. Ahí reconoció que se tiene un problema con la contratación de policías, pues sólo se tiene 115 elementos en la Policía Preventiva Municipal, además de que les hace falta equipamiento, que se adquirirá con un recurso de 27 millones de pesos que se tiene del programa de Fortalecimiento a la Seguridad (Fortaseg), el cual vino a sustituir al antes Subsidio para la Seguridad Pública de los Municipios (Subsemun).
Con este recurso, indicó, se adquirirán seis nuevas patrullas que se incorporarán a la flota existente y se está en espera de que se apruebe el Mando Único Estatal para poder contar con más elementos policiacos estatales.
Este recurso servirá también para implementar proyectos productivos en los polígonos que se han identificado como de una alta incidencia delictiva, de esta forma de generarán empleos que evitarán que jóvenes se empleen con la delincuencia.
En referencia a los constantes llamados que han hecho los obispos para que se busque tener un diálogo con grupos delincuenciales que permita tener tregua en los actos delictivos y se restablezca la paz y la seguridad en esta capital, el edil refirió, “como autoridad lo que veo es que los grupos delincuenciales están fuera del estado de derecho y lo que veo es que si existe algún gestor, alguien que pueda platicar con ellos y moverles su espíritu y su buena fe y su conducta, yo lo aplaudo, para que pueda ser de esa manera, pero como autoridad no puedo entrar a la ilegalidad para poder tener acuerdos con los grupos delincuenciales”.
Se le insistió en preguntarle si el obispo sería el gestor adecuado para dialogar con los delincuentes y respondió: “si él se presta, tanto el obispo como quien se preste para hacerlo, adelante”.
Por otra parte se le cuestionó al alcalde la situación que prevalece en el mercado central “Baltasar R. Leyva Mancilla” donde hace unos días asesinaron al principal dirigente, Juan Serrano Moreno.
Al respecto señaló que se reunió con empresarios que le hicieron algunas propuestas que tienen que ver con un cambio radical en la administración del mercado, “necesitamos un buen administrador que sepa de finanzas, que tenga buena mano izquierda y que esté metido siempre en la ruta de la legalidad, para que pueda dialogar en un mercado donde siempre hay conflictos”. (Abel Miranda Ayala)


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