CAPASEG somete a un estudio de calidad el agua que consumimos en Chilpancingo

La Comisión de Agua Potable, Alcantarillado y Saneamiento del Estado de Guerrero (CAPASEG), realiza un estudio sobre la calidad del agua que se distribuye en tubos a las casas, oficinas y comercios de Chilpancingo.

La CAPASEG realiza el estudio del agua que suministra la Comisión de Agua Potable y Alcantarillado de Chilpancingo (CAPACH), después de que esta Agencia de Noticias IRZA, el 23 de febrero difundió los resultados de los análisis practicados al vital líquido en el Laboratorio de Microbiología Molecular y Biotecnología Ambiental de la Unidad Académica de Ciencias Químicas de la Universidad Autónoma de Guerrero (UAGro), que revelaron que el elemento está contaminado con coliformes fecales y totales, con predominio de bacterias Escherichia coli (E. coli), lo que representa un atentado contra la salud pública y un fraude contra la población al no ser potable y no apta para el consumo humano.
Una fuente de la CAPASEG dijo que el estudio se encuentra en proceso y que sería en fechas próximas que podría ser revelado, lo que contradice al titular de la dependencia, Arturo Jesús Palma Carro, quien asegura de manera pública que el agua que suministra la CAPACH es apta para el consumo humano, como lo reiteró este martes en entrevista, donde también dijo que de 116 plantas tratadoras de aguas en Guerrero, más de la mitad están cerradas o no operan por la dificultad financiera para pagar su mantenimiento que incluye el servicio de energía eléctrica. Arturo Palma Carro explicó que eso se debe a que los alcaldes que recién tomaron posesión no quieren hacerse responsables de su operación.
“Cuando entran los nuevos presidentes municipales, la CAPASEG se da a la tarea de levantar (rehabilitar) todas las plantas tratadoras de aguas y de capacitar a la gente del presidente municipal, porque meten al compadre, al padrino, al ingeniero en escuelas que de plantas tratadoras no saben nada y entonces se les vuelven a caer las plantas, eso aunado a que se debe pagar la energía eléctrica porque no hay fondo federal o estatal, lo tiene que costear el municipio” y muchas veces el municipio le echa candado al asunto y cierra la planta, reseñó.
“Ningún municipio aportó un peso, es muy triste eso y les regresé sus plantas (a los municipios), porque la obligación es de los municipios mantenerlas funcionando, nosotros le damos apoyo técnico únicamente”, añadió.
El funcionario estatal dijo que hasta el último censo que tienen en Capaseg son 116 plantas en el estado, “algunas las construye el municipio y tenemos el dato que más del 50 por ciento están paradas; en los municipios más pobres están cerradas porque se ven incapacitados para pagar la energía eléctrica”.
Dijo que la mayoría de plantas tratadoras que no opera se encuentran en municipios con poco presupuesto anual y que en Chilpancingo, Coyuca de Benítez, trabajan “adecuadamente”. (www.agenciairza.com)

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