Se declara el Ayuntamiento de Tixtla en quiebra financiera por graves adeudos

Tixtla, Gro.— El ayuntamiento de Tixtla, que encabeza Hossein Nabor Guillén, se declaró en quiebra financiera, luego del adeudo de 120 millones de pesos, heredado por concepto de un juicio mercantil por compra de fertilizante, 80 laudos laborales, sueldos de trabajadores, anticipos de participaciones del gobierno del Estado, entre otros, que de no ser cubiertos, podrían derivar en su destitución y la de la síndica procuradora.

En conferencia de prensa, acompañado de integrantes del Cabildo municipa; a once días de haber asumido la alcaldía, Nabor Guillén, dio a conocer el acuerdo tomado desde el lunes pasado al interior del cuerpo edilicio, de declarar la quiebra financiera del municipio.
Desglosó que el Sistema de (Semapa), presenta un adeudo de 5 millones 574 mil 752 pesos; sueldos de trabajadores, pensiones alimenticias, préstamos y anticipos de participaciones del gobierno del Estado, para pagar aguinaldo, gastos médicos, alumbrado público, seguro de vida de policías, cuotas del ISSSTE, fondo de ahorro, Plan flexible, préstamos al ISSPEG, bono del día de padre, pago de ataúdes, 5 millones, 605 mil 941 pesos.
El adeudo más fuerte, es por laudos laborales, 35 millones 358 mil 870 pesos; un juicio mercantil generador entre el 200-2011, por la compra de fertilizante, que se ha incrementado por intereses moratorios, ha llegado a 69 millones de pesos, solo entre estos dos conceptos, el ayuntamiento de Tixtla, enfrenta una deudo de 105 millones de pesos, 196 mil 877 pesos; que sumados al reto hacen un gran total de 120 millones de pesos.
Al año indicó Nabor Guillén, el ayuntamiento de Tixtla, recibe un presupuesto de 30 millones de pesos, y como ejemplo mencionó el caso de uno solo de los demandantes, que representa un adeudo de un millón 800 mil pesos.
Derivado de ello, al considerar que se trata de una deuda enorme e impagable, es que se han declarado en quiebra, y junto con su cabildo, pidió la intervención del gobierno del Estado para que interceda ante el Secretario de Hacienda y Crédito Público, a fin de que implemente políticas de apoyo fiscal a los municipios con problemas de laudos laborales.
El alcalde de Tixtla, reconoció que los adeudos son institucionales y como tal su administración los tiene que enfrentar, sin embargo, comentó que están haciendo una revisión de cada caso, porque en algunos de ellos no procede.
Al mismo tiempo dijo que enviará las respectivas justificaciones a la Auditoría General del Estado, para que realice las investigaciones correspondientes y fije responsabilidades a los ex funcionarios y servidores públicos que generaron este millonario adeudo.
También dio a conocer que durante el proceso de entrega-recepción, no les entregaron el informe financiero del ejercicio fiscal 2015, así como tampoco un informe del primero al 28 de enero del año en curso, en el que todavía ejercieron recursos, por lo que apuntó “respecto a todos los adeudos que tiene el ayuntamiento, tenemos que hacerle frente como ayuntamiento, no podemos darle la espalda , lo que sí, vamos a hacer todas las denuncias que desde el punto de vista legal esté en nosotros como ayuntamiento pero la autoridad responsable de verificar y sancionar, es la auditoría General del Estado”, recalcó.
Para hacer frente a esta crisis financiera indicó el presidente municipal de Tixtla, se vería afectado el ramo 28, en el que se engloba el gasto corriente y la nómina, por lo que anunció que implementará una administración de austeridad , ya que de no hacerlo, el ayuntamiento tendría que cerrar por lo menos un año, para poder pagar la deuda.
Dio a conocer, que han recibido ya, el primer aviso fiscal, en el que advierten que en caso de no pagar, la Síndica procuradora Gloria Martínez Martínez, podría ser destituida de su cargo.
Para evitar heredar a su vez esta misma situación a su sucesor, Nabor Guillén, advirtió que a todos sus trabajadores, firmarán un contrato de trabajo por tres meses, con la aclaración que no podrán quedarse en el ayuntamiento una vez que concluya la administración, además de que hará una revisión de la plantilla laboral de alrededor de 700 empleados municipales, y en aquellos casos con poca antigüedad y en base a las posibilidades de liquidación, prescindirá de sus servicios. (NOTYMAS)