No recibieron su quincena y paran labores en CAPACH

Trabajadores de la Comisión de Agua Potable y Alcantarillado de Chilpancingo (Capach), afiliados a la sección 32 del SUSPEG, realizaron este miércoles un paro de labores y toma de sus instalaciones para demandar al gobierno municipal el inmediato pago de sus salarios correspondientes a la primera
quincena de noviembre, misma que ya devengaron y no se les ha cubierto.
El secretario general del sindicato, Germán Antaño Moreno, destacó que el depósito de sus quincenas se tiene que realizar un día antes de los días 15 y 30 de cada mes para que el día que les corresponde recibir los emolumentos se encuentren depositados en sus cuentas individuales, sin embargo sin ninguna explicación esta quincena se les retrasó tres días y por ello decidieron no salir a trabajar y manifestarse.
Agregó que la inconformidad inició desde la tarde del martes, cuando se concentraron todos los trabajadores a la hora de salida para pedir su pago, para atenderlos se presentó una persona de apellido Lara que les dijo que sería en los próximos días designado oficialmente director de la CAPACH y atendería el problema, sólo que tendrían que esperar unas horas para que se realizaran las transferencias bancarias, y se comprometió a que el mismo martes a la seis de la tarde estarían los recursos en sus tarjetas.
Lo cierto es que ninguno de los trabajadores recibió su depósito y ello obligó a que suspendieran actividades y se concentraran en las oficinas con la determinación de que no regresarán a sus labores hasta que les paguen.
El dirigente señaló que alrededor de las once de la mañana recibió una llamada telefónica en la que se les informó que ya estaban los pagos y sólo habría que esperar un poco a que se vieran reflejados, sin embargo temiendo ser nuevamente engañados, los trabajadores determinaron mantener su protesta hasta que el dinero estuviera en las cuentas, lo que ocurrió una hora después.
Adicionalmente a la falta de pago de la quincena, los trabajadores indicaron que la paraestatal mantiene adeudos de prestaciones como uniformes, calzado y despensas, entre otros, además de que tiene adeudos con el Instituto mexicano del Seguro Social, lo que podría perjudicarles cuando lleguen al fin de su vida laboral y busquen jubilarse. (Por Abel Miranda Ayala)

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