Llama Obispo a no lucrar con el dolor de los familiares de los desaparecidos

El obispo de la Diócesis Chilpancingo-Chilapa, Salvador Rangel Mendoza, declaró que en el caso de Iguala, en donde hace un año seis personas fueron asesinadas y 43 normalistas de Ayotzinapa desaparecieron, las autoridades deben de realizar un cabal esfuerzo para esclarecer los hechos y llegar
a la verdad sin adjetivos. "Nos duele el sufrimiento, la rabia, la desesperación y la desconfianza de los familiares de estos 43 jóvenes y de las familias de los miles de desaparecidos en todo el país", señala el prelado en un comunicado que difundió al cumplirse este sábado 26 un año de los hechos de Iguala. "Ante esta dramática situación, no bastan discursos; se requiere un cabal esfuerzo de las autoridades responsables para esclarecer los hechos y llegar junto con la sociedad, empezando por las familias de todos los desaparecidos, a la verdad sin adjetivos", puntualiza. Indica que el sufrimiento y la pobreza de los padres, hermanos y parientes de los desaparecidos no deben ser usados por personas y grupos sin escrúpulos que persiguen sus propios intereses y sacar "raja política" posesionándose del tema. Señala que el anarquismo, la violencia y la intransigencia sólo provocan confusión, desorden, destrucción y, lo más triste, pérdida de vidas. "La violencia no es el camino para la justicia, al contrario, aumenta la injusticia y el dolor", señala el obispo. (www.agenciairza.com)