Guerrero, reprobado en readaptación social: presidente de la CODDEHUM
El presidente de la Comisión de los Derechos Humanos (CODDEHU), reconoció que en las cárceles del estado, no se cumple con el objetivo de la reinserción social de los detenidos e impera la violación a los derechos humanos, sobrepoblación, y contaminación de reos, lo que genera que al ser absueltos
sean más peligrosos.
Reconoció que la mayoría de los Centro de Reinserción Social no cumple con sus objetivos, pues los reos sufren de malos tratos por parte de los custodios quienes no cuentan con la capacitación para desarrollar su trabajo.
Indicó que para una verdadera reinserción social de quienes se le ha comprobado un delito y se encuentra purgando una condena, se debe de tener condiciones dignas, donde el individuo pueda pensar y reflexionar sobre sus actos y el estar recluido en una cárcel, no le quita el derecho a la educación, salud, alimentación, lectura, deporte y de no ser así, difícilmente se logra el objetivo.
Manifestó que uno de los principales problemas que tienen las cárceles en el estado es la sobrepoblación de reos y las condiciones deplorables de los inmuebles, pues no existe inversión en el tema y el Sistema Penitenciario en Guerrero se encuentra reprobado.
La sobrepoblación es uno de los principales problemas por los que atraviesan las cárceles en el estado y la del puerto de Acapulco, es la que presenta el número más alto, pues dicho inmueble fue construido para albergar a mil presos, pero en la actualidad cuenta con dos mil internos, manifestó.
Detalló que las celdas están construidas para seis personas, pero ante la sobrepoblación en ellas habitan hasta 12 personas o más, lo cual califico como caótico y genera una mala atención médica, de alimentación y espacios recreativos, entonces “no se puedo hablar de una reinserción social, no se cumple con el objetivo”, lamentó.
Los penales de Ayutla de los Libres, Chilpancingo e Iguala, dijo que también cuentan con una “sobrepoblación significativa”, aunque no tan grave como la que se presenta en el puerto de Acapulco.
Otros de los problemas por los que atraviesan las cárceles, es que desempeñan una doble función dijo, pues se alberga a reos del orden federal y del fuero común, por lo que se vuelve una situación complicada, pues los sentenciados por delincuencia organizada, deberían de tener un CERESO especial.
Dicha relación dijo se convierte en una situación compleja, pues hay una contaminación de reos y se “corre el riesgo de que después de un encierro de esos, le estemos entregando a la sociedad a un delincuente más, de alguien que entró por un delito menor, por eso la importancia de poder separar a los reos”, lo cual dijo es un problema general.
En las cárceles no se encuentran separados los sentenciados con los procesados y en muchos de los casos no hay separación entre hombres y mujeres en sus áreas comunes, lo que representa otro problema para la readaptación social, expuso.
Las condiciones en las que se encuentran los inmuebles también son fundamentales para que los reos puedan lograr con el objetivo de la readaptación, pues dijo que existen algunos CERESO’s como el de Ayutla, “el cual es una verdadera cárcel de rancho”, pues las condiciones del inmueble no son las adecuadas.
En esa misma situación se encuentras los de: Tecpan de Galena, San Luis Acatlán, Taxco y Malinaltepec. Mientras que los inmuebles de Chilpancingo, Iguala y Tlapa de Comonfort, se encuentran dentro del rango “mediamente aceptable”.
Mientras que los CERESO’s de Acapulco, Chilapa, Coyuca de Benítez y Arcelia, son inmuebles nuevos, pero eso no los excluye de los problemas antes mencionados.
Expresó que los resultados dados a conocer por la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH), donde reprueba el estado de Guerrero en el tema del Sistema Penitenciario, es un trabajo que durante años se han realizado en conjunto con la CODDEHUM. (NOTYMAS)
sean más peligrosos.
Reconoció que la mayoría de los Centro de Reinserción Social no cumple con sus objetivos, pues los reos sufren de malos tratos por parte de los custodios quienes no cuentan con la capacitación para desarrollar su trabajo.
Indicó que para una verdadera reinserción social de quienes se le ha comprobado un delito y se encuentra purgando una condena, se debe de tener condiciones dignas, donde el individuo pueda pensar y reflexionar sobre sus actos y el estar recluido en una cárcel, no le quita el derecho a la educación, salud, alimentación, lectura, deporte y de no ser así, difícilmente se logra el objetivo.
Manifestó que uno de los principales problemas que tienen las cárceles en el estado es la sobrepoblación de reos y las condiciones deplorables de los inmuebles, pues no existe inversión en el tema y el Sistema Penitenciario en Guerrero se encuentra reprobado.
La sobrepoblación es uno de los principales problemas por los que atraviesan las cárceles en el estado y la del puerto de Acapulco, es la que presenta el número más alto, pues dicho inmueble fue construido para albergar a mil presos, pero en la actualidad cuenta con dos mil internos, manifestó.
Detalló que las celdas están construidas para seis personas, pero ante la sobrepoblación en ellas habitan hasta 12 personas o más, lo cual califico como caótico y genera una mala atención médica, de alimentación y espacios recreativos, entonces “no se puedo hablar de una reinserción social, no se cumple con el objetivo”, lamentó.
Los penales de Ayutla de los Libres, Chilpancingo e Iguala, dijo que también cuentan con una “sobrepoblación significativa”, aunque no tan grave como la que se presenta en el puerto de Acapulco.
Otros de los problemas por los que atraviesan las cárceles, es que desempeñan una doble función dijo, pues se alberga a reos del orden federal y del fuero común, por lo que se vuelve una situación complicada, pues los sentenciados por delincuencia organizada, deberían de tener un CERESO especial.
Dicha relación dijo se convierte en una situación compleja, pues hay una contaminación de reos y se “corre el riesgo de que después de un encierro de esos, le estemos entregando a la sociedad a un delincuente más, de alguien que entró por un delito menor, por eso la importancia de poder separar a los reos”, lo cual dijo es un problema general.
En las cárceles no se encuentran separados los sentenciados con los procesados y en muchos de los casos no hay separación entre hombres y mujeres en sus áreas comunes, lo que representa otro problema para la readaptación social, expuso.
Las condiciones en las que se encuentran los inmuebles también son fundamentales para que los reos puedan lograr con el objetivo de la readaptación, pues dijo que existen algunos CERESO’s como el de Ayutla, “el cual es una verdadera cárcel de rancho”, pues las condiciones del inmueble no son las adecuadas.
En esa misma situación se encuentras los de: Tecpan de Galena, San Luis Acatlán, Taxco y Malinaltepec. Mientras que los inmuebles de Chilpancingo, Iguala y Tlapa de Comonfort, se encuentran dentro del rango “mediamente aceptable”.
Mientras que los CERESO’s de Acapulco, Chilapa, Coyuca de Benítez y Arcelia, son inmuebles nuevos, pero eso no los excluye de los problemas antes mencionados.
Expresó que los resultados dados a conocer por la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH), donde reprueba el estado de Guerrero en el tema del Sistema Penitenciario, es un trabajo que durante años se han realizado en conjunto con la CODDEHUM. (NOTYMAS)
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