En esta 60 Legislatura el Congreso hizo lo que era su obligación: BOJ
Después de resaltar que aun cuando no se va satisfecho sí se va contento por el deber cumplido, el presidente de la Comisión de Gobierno del Congreso local, Bernardo Ortega Jiménez, confirmó ayer que los diputados locales no recibirán ningún bono económico por el fin de legislatura y resaltó que a
pesar de los destrozos que sufrió en los meses pasados dejará una sede legislativa en condiciones de laborar y un Congreso caminando y sin deudas económicas.
Asimismo, a pesar de que lamentó la ríspida relación que tuvo el Congreso del Estado con el gobernador Rogelio Ortega Martínez, el también coordinador de la Fracción Parlamentaria del Partido de la Revolución Democrática (PRD), afirmó que “el Congreso caminó e hizo lo que tuvo que haber hecho”.
De entrada, el legislador local resaltó que si bien no se va satisfecho sí se va contento “con toda y aquella problemática que se registró el año pasado y en los primeros meses del 2015; creo que hicimos nuestro máximo esfuerzo”.
Es más, expresó categórico que “como presidente de la Comisión de Gobierno jamás me desentendí del Poder Legislativo, aquí estuve día a día porque ese era mi compromiso y el trabajo que me encomendaron mi fracción, los 46 diputados y mis electores”.
El legislador local fue entrevistado la tarde de ayer en el despacho de la Presidencia de la Comisión de Gobierno, el cual ocupó durante estos tres años.
Ahí, cuestionado acerca del riesgo que representa para el Congreso local el hecho de que no se liquide a los más de 300 trabajadores de confianza por el fin de Legislatura, debido a que el gobierno del estado no ha liberado los recursos ya etiquetados para ello, reconoció que podría enfrentar demandas laborales y con ello meter en problemas financieros a la 61 Legislatura.
En este sentido, Ortega Jiménez destacó que a pesar de los problemas que enfrentó, dejará un Congreso caminando y sin mayores deudas económicas que las que “normalmente” se presentan cada fin de año por el pago de salarios, aguinaldos y demás prestaciones a los empleados.
En cuanto al bono para los trabajadores de confianza por el fin de Legislatura, mencionó que no se ha pagado porque el gobierno estatal no ha liberado el recurso, a pesar de que hubo el compromiso por parte del gobierno estatal de entregar el dinero para este fin: “sus funcionarios asumieron ese compromiso”.
Al respecto, confió en que al final de cuentas, el gobernador sustituto Rogelio Ortega liberará los recursos para el bono de fin de legislatura para los trabajadores del Congreso, ya que fue un compromiso al que se llegó desde diciembre del año pasado: que liberaría los recursos para el bono y para la liquidación de los trabajadores.
Y precisamente en cuanto a la liquidación de los trabajadores señaló que son más de 300 los que llegaron con los actuales diputados locales y que se tienen que ir con ellos, ya que incurrirían en una grave irresponsabilidad si los dejaran, pues los diputados locales que llegarán a partir del 13 de septiembre traerán sus propios colaboradores.
Por tal motivo, mencionó que si estos trabajadores no son liquidados se corre el riesgo de que el Congreso local enfrente demandas laborales y con ello la 61 Legislatura enfrentaría aprietos financieros, ya que saldría más caro.
Lo que sí quiso dejar muy claro es que los diputados locales no recibirán ningún bono de fin de legislatura, como trascendió en algunos medios de comunicación.
Destacó además que a pesar de los destrozos que ocasionaron en meses pasados los maestros de la Coordinadora Estatal de Trabajadores de la Educación (CETEG) y los estudiantes de la Escuela Normal Rural de Ayotzinapa, en estos momentos el Congreso local ya está en condiciones de laborar.
En cuanto a lo legislativo, Ortega Jiménez señaló que los pendientes que quedan son las iniciativas de Ley de Amnistía, las reformas al Código Civil para permitir el matrimonio entre homosexuales y lesbianas; los decretos para crear cuatro nuevos municipios; lo relativo a la integración del Concejo Municipal de Tixtla, y las reformas a la Ley Orgánica del Poder Legislativo, cuyo dictamen ya está elaborado por si únicamente quieren presentarlo al pleno del Congreso local.
De la creación de la Sierra como la Octava Región Económica del estado, el presidente de la Comisión de Gobierno del Congreso local dijo que no reúne las condiciones para ello.
De la mala relación que llevaron los diputados locales de la todavía 60 Legislatura con el gobernador sustituto, Rogelio Ortega Martínez, no quiso abundar mucho al respecto y sólo se limitó a decir que “el Congreso caminó e hizo lo que tuvo que haber hecho”.
Y agregó: “no hubo una rispidez que digamos de cuerpo a cuerpo, más bien hubo desavenencias, no hubo el acoplamiento, pero de manera institucional se hizo lo que tuvo que haberse hecho, pero este poder no debe estar a expensas de otro poder, o que otro poder quiera tener a expensas al Poder Legislativo. (Baltazar Jiménez Rosales)
pesar de los destrozos que sufrió en los meses pasados dejará una sede legislativa en condiciones de laborar y un Congreso caminando y sin deudas económicas.
Asimismo, a pesar de que lamentó la ríspida relación que tuvo el Congreso del Estado con el gobernador Rogelio Ortega Martínez, el también coordinador de la Fracción Parlamentaria del Partido de la Revolución Democrática (PRD), afirmó que “el Congreso caminó e hizo lo que tuvo que haber hecho”.
De entrada, el legislador local resaltó que si bien no se va satisfecho sí se va contento “con toda y aquella problemática que se registró el año pasado y en los primeros meses del 2015; creo que hicimos nuestro máximo esfuerzo”.
Es más, expresó categórico que “como presidente de la Comisión de Gobierno jamás me desentendí del Poder Legislativo, aquí estuve día a día porque ese era mi compromiso y el trabajo que me encomendaron mi fracción, los 46 diputados y mis electores”.
El legislador local fue entrevistado la tarde de ayer en el despacho de la Presidencia de la Comisión de Gobierno, el cual ocupó durante estos tres años.
Ahí, cuestionado acerca del riesgo que representa para el Congreso local el hecho de que no se liquide a los más de 300 trabajadores de confianza por el fin de Legislatura, debido a que el gobierno del estado no ha liberado los recursos ya etiquetados para ello, reconoció que podría enfrentar demandas laborales y con ello meter en problemas financieros a la 61 Legislatura.
En este sentido, Ortega Jiménez destacó que a pesar de los problemas que enfrentó, dejará un Congreso caminando y sin mayores deudas económicas que las que “normalmente” se presentan cada fin de año por el pago de salarios, aguinaldos y demás prestaciones a los empleados.
En cuanto al bono para los trabajadores de confianza por el fin de Legislatura, mencionó que no se ha pagado porque el gobierno estatal no ha liberado el recurso, a pesar de que hubo el compromiso por parte del gobierno estatal de entregar el dinero para este fin: “sus funcionarios asumieron ese compromiso”.
Al respecto, confió en que al final de cuentas, el gobernador sustituto Rogelio Ortega liberará los recursos para el bono de fin de legislatura para los trabajadores del Congreso, ya que fue un compromiso al que se llegó desde diciembre del año pasado: que liberaría los recursos para el bono y para la liquidación de los trabajadores.
Y precisamente en cuanto a la liquidación de los trabajadores señaló que son más de 300 los que llegaron con los actuales diputados locales y que se tienen que ir con ellos, ya que incurrirían en una grave irresponsabilidad si los dejaran, pues los diputados locales que llegarán a partir del 13 de septiembre traerán sus propios colaboradores.
Por tal motivo, mencionó que si estos trabajadores no son liquidados se corre el riesgo de que el Congreso local enfrente demandas laborales y con ello la 61 Legislatura enfrentaría aprietos financieros, ya que saldría más caro.
Lo que sí quiso dejar muy claro es que los diputados locales no recibirán ningún bono de fin de legislatura, como trascendió en algunos medios de comunicación.
Destacó además que a pesar de los destrozos que ocasionaron en meses pasados los maestros de la Coordinadora Estatal de Trabajadores de la Educación (CETEG) y los estudiantes de la Escuela Normal Rural de Ayotzinapa, en estos momentos el Congreso local ya está en condiciones de laborar.
En cuanto a lo legislativo, Ortega Jiménez señaló que los pendientes que quedan son las iniciativas de Ley de Amnistía, las reformas al Código Civil para permitir el matrimonio entre homosexuales y lesbianas; los decretos para crear cuatro nuevos municipios; lo relativo a la integración del Concejo Municipal de Tixtla, y las reformas a la Ley Orgánica del Poder Legislativo, cuyo dictamen ya está elaborado por si únicamente quieren presentarlo al pleno del Congreso local.
De la creación de la Sierra como la Octava Región Económica del estado, el presidente de la Comisión de Gobierno del Congreso local dijo que no reúne las condiciones para ello.
De la mala relación que llevaron los diputados locales de la todavía 60 Legislatura con el gobernador sustituto, Rogelio Ortega Martínez, no quiso abundar mucho al respecto y sólo se limitó a decir que “el Congreso caminó e hizo lo que tuvo que haber hecho”.
Y agregó: “no hubo una rispidez que digamos de cuerpo a cuerpo, más bien hubo desavenencias, no hubo el acoplamiento, pero de manera institucional se hizo lo que tuvo que haberse hecho, pero este poder no debe estar a expensas de otro poder, o que otro poder quiera tener a expensas al Poder Legislativo. (Baltazar Jiménez Rosales)
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