Comprueban que la planta de tratamiento de aguas residuales está fuera de servicio

Personal de la Procuraduría Estatal de Protección Ecológica confirmó ayer que la Planta de Tratamiento de Aguas Residuales de Chilpancingo se encuentra apagada y vertiendo al cauce del río Huacapa más de 200 litros por segundo de aguas negras, por lo que con esta inspección se inicia el
proceso legal que podría derivar en sanciones para el Ayuntamiento de Chilpancingo.
El grupo de trabajo de la PROPEG estuvo encabezado directamente por el titular de la dependencia, José Pérez Victoriano, quien refirió que fueron informados que desde hace un mes fue desconectado el suministro de energía eléctrica y desde entonces se dejó de realizar el tratamiento a las aguas residuales y se vierte toda la contaminación directamente al cauce del río.
El funcionario indicó que una vez realizada la inspección se establecen protocolos de trabajo que implica dar comunicación de este hecho a dependencias estatales y federales que tiene que ver con el tema, tales como la CONAGUA, la CAPASEG, la PROFEPA, SEMARNAT, a fin de que todas en el ámbito de su competencia atiendan el asunto y en primer lugar se garantice que no se siga contaminando el cauce del río, después en un análisis con los abogados determinar qué tipo de sanciones aplican por esta falta.
Reiteró que la contaminación vertida en el cauce del Huacapa genera escurrimientos de aguas negras que se suman a las descargas residuales de pueblos que están al sur de la capital como Petaquillas, Tepechicotlán, Mochitlán y otros, que llegan hasta el río Azul, mismos que hasta este momento es considerado de agua limpia, pero se está contaminando con las aguas residuales de la capital.
Cabe señalar que en el lugar se encontró a todo el personal que normalmente opera esta planta de tratamiento de aguas residuales, mismos que indicaron estar trabajando todos los días pero al no haber energía eléctrica no se puede operar la planta.
Finalmente empleados advirtieron que el problema de falta de recursos en la CAPACH se agudizará en los próximos meses, debido a que fueron cambiados los equipos de bombeos en los sistemas de Acahuizotla y Mochitlán por bombas de mayor tamaño, que obviamente generarán un gasto mayor de energía eléctrica, “sabíamos que la planta de tratamiento generaría problemas a corto plazo, desde que la construyó Zeferino Torreblanca y dijo, que dejaba recursos para operarla unos meses y después sería responsabilidad del municipio, donde no se tiene recursos para tal gasto. (Por Abel Miranda Ayala)