Ocasionará hambruna la pérdida del 60 por ciento de producción de maíz
*Las regiones que podrían padecer este grave problema son la
Montaña Alta y parte de la Costa Chica: Antonio Colín
Ramírez Baltazar Jiménez Rosales
Habrá hambruna en las regiones de más alta marginación del estado como la región de la Montaña Alta y parte de la Costa Chica. La causa es la pérdida del 60 por ciento de las 450 mil hectáreas de maíz que fueron sembradas en junio pasado a consecuencia de la sequía y la canícula.
Esta situación, mencionó Antonio Colín Ramírez, presidente del Colegio de Ingenieros Agrónomos de Guerrero, mantiene preocupados a los campesinos del estado y a las organizaciones sociales y campesinas, sobre todo por el engaño del que fueron objeto por parte del gobierno federal ya que no puso en marcha los proyectos para detonar el desarrollo del campo de Guerrero.
Señaló que el problema es alarmante porque la proyección que se tiene es que en este ciclo agrícola sólo se logrará el 30 por ciento de los sembradíos de maíz, ya que hasta ahora los reportes indican que ya se perdió el 60 por ciento de la producción del grano básico por la sequía y los efectos de la canícula en la entidad.
Esto provocará hambruna principalmente en las regiones más pobres de la entidad, como las comunidades asentadas en la región de la Montaña Alta y parte de la Costa Chica, alertó el también coordinador del Frente Popular para el Desarrollo Sustentable del Estado.
Por lo anterior, señaló que las más de 100 organizaciones que integran este Frente solicitaron al gobierno federal retomar los proyectos que quedaron pendientes por financiar el año pasado y que englobaban una inversión de 20 mil millones de pesos para detonar el desarrollo del estado.
Aclaró que estos 20 mil millones de pesos no serían manejados por las organizaciones sociales y campesinas sino por el propio gobierno federal a través de sus delegaciones.
En base a esto, Colín Ramírez refirió que lo único que piden las organizaciones sociales y campesinas es que ahora sí se aplique tal inversión para que el campo de Guerrero no se vea tan afectado.
Y es que dijo que en caso de que el gobierno federal no atienda esta demanda, por la desesperación que generará la hambruna, la gente podría tomar “otras actitudes”.
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