Debe Federación declarar a Guerrero zona de desastre, por la sequía: ERS
Por las graves afectaciones causadas por la sequía al 80 por ciento de los sembradíos de maíz, la Federación debe de declarar a Guerrero como zona de desastre en materia agrícola, en tanto que en el gobierno del estado deben de dejarse de “mucho burocratismo” y realmente ponerse a trabajar.
En esos términos se pronunció el coordinador de la Liga de Comunidades Agrarias y Sindicatos Campesinos, Evencio Romero Sotelo, tras reiterar que es grave la situación del campo guerrerense ante la pérdida del 80 por ciento de las más de 450 mil hectáreas que se sembraron al inicio del presente ciclo agrícola.
En este sentido, criticó el hecho de que la Secretaría de Desarrollo Rural (Seder) apenas haya informado en conferencia de prensa las afectaciones por la sequía cuando lo que debieron hacer es ponerse a trabajar e informar a la Federación con el fin de que lo antes posible se active el seguro catastrófico y fluyan los apoyos hacia los campesinos afectados.
Por lo anterior, emplazó a la Seder a “poner manos a la obra” y dejarse de burocratismos, porque “eso de estar dando conferencias de prensa y decir lo que se va a hacer no sirve de nada”.
Y es que dijo que lo que el campo guerrerense requiere es que comiencen a fluir los recursos para los campesinos afectados, principalmente para aquellos que siembran para autoconsumo y que en un futuro inmediato no tendrán para comer.
Señaló que a pesar de que “no sirven de nada” los mil 500 pesos que por hectárea siniestrada se da a los campesinos afectados por la sequía, el gobierno de la República ya los debería estar liberando con el fin de que los productores vean la posibilidad de recuperar cuando menos algo de lo que perdieron. Romero Sotelo calificó como un desastre el presente ciclo agrícola, ya que por la sequía la producción agrícola se desplomará de manera alarmante puesto que quienes sembraron a finales de mayo y mediados de junio ya perdieron sus cosechas por la falta de lluvia, aunque quienes lo hicieron a finales de junio y principios de julio todavía pueden salvar algo.
Señaló que nada más para precisar los daños causados por la sequía al campo de Guerrero, en los próximos días las organizaciones sociales y campesinas aglutinadas en el Foro Permanente se reunirán para realizar un análisis y tomar un acuerdo acerca de las acciones que emprenderán con miras a exigir a los gobiernos federal y estatal que se agilicen los apoyos a los productores cuyos sembradíos resultaron siniestrados. (Baltazar Jiménez Rosales)
En esos términos se pronunció el coordinador de la Liga de Comunidades Agrarias y Sindicatos Campesinos, Evencio Romero Sotelo, tras reiterar que es grave la situación del campo guerrerense ante la pérdida del 80 por ciento de las más de 450 mil hectáreas que se sembraron al inicio del presente ciclo agrícola.
En este sentido, criticó el hecho de que la Secretaría de Desarrollo Rural (Seder) apenas haya informado en conferencia de prensa las afectaciones por la sequía cuando lo que debieron hacer es ponerse a trabajar e informar a la Federación con el fin de que lo antes posible se active el seguro catastrófico y fluyan los apoyos hacia los campesinos afectados.
Por lo anterior, emplazó a la Seder a “poner manos a la obra” y dejarse de burocratismos, porque “eso de estar dando conferencias de prensa y decir lo que se va a hacer no sirve de nada”.
Y es que dijo que lo que el campo guerrerense requiere es que comiencen a fluir los recursos para los campesinos afectados, principalmente para aquellos que siembran para autoconsumo y que en un futuro inmediato no tendrán para comer.
Señaló que a pesar de que “no sirven de nada” los mil 500 pesos que por hectárea siniestrada se da a los campesinos afectados por la sequía, el gobierno de la República ya los debería estar liberando con el fin de que los productores vean la posibilidad de recuperar cuando menos algo de lo que perdieron. Romero Sotelo calificó como un desastre el presente ciclo agrícola, ya que por la sequía la producción agrícola se desplomará de manera alarmante puesto que quienes sembraron a finales de mayo y mediados de junio ya perdieron sus cosechas por la falta de lluvia, aunque quienes lo hicieron a finales de junio y principios de julio todavía pueden salvar algo.
Señaló que nada más para precisar los daños causados por la sequía al campo de Guerrero, en los próximos días las organizaciones sociales y campesinas aglutinadas en el Foro Permanente se reunirán para realizar un análisis y tomar un acuerdo acerca de las acciones que emprenderán con miras a exigir a los gobiernos federal y estatal que se agilicen los apoyos a los productores cuyos sembradíos resultaron siniestrados. (Baltazar Jiménez Rosales)
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