Lo que necesita Guerrero es pacificarse, no legalizar de drogas: Héctor Astudillo

El gobernador electo Héctor Astudillo Flores consideró que por el problema tan serio de inseguridad y violencia que presenta el estado, los gobiernos federal y estatal tienen que hacer un esfuerzo mayor para atender las zonas más críticas, aunque afirmó que la legalización de las drogas no es la vía.

Entrevistado la mañana de ayer en un evento con economistas, Astudillo Flores enfatizó que para salir de los niveles de pobreza que presenta lo primero que necesita Guerrero es pacificarse, volver a la normalidad.
Reconoció que en Guerrero realmente enfrenta un problema muy serio: “un problema muy visible para todos, por el cual el gobierno federal y el gobierno del estado tienen que hacer un esfuerzo mayor para atender las zonas más críticas, para que Guerrero pueda volver a la elemental normalidad y no la crisis que ha habido en los últimos días que es brutal”.
Cuestionado acerca de que si la legalización de las drogas es la vía para combatir la inseguridad y la violencia, como lo plantea el gobernador sustituto Rogelio Ortega Martínez, el mandatario estatal electo dijo no compartir esta opinión.
“En ese planteamiento yo considero que es con la educación con mejores medios de comunicación, con carreteras, con mejores escuelas, empleo y con muchas cosas, pero no con la legalización de las drogas”, apuntó.
Respecto a que la pobreza en Guerrero aumentó en un 60 por ciento, de la cual el 30 por ciento es extrema, Astudillo Flores, señaló que para salir de esta terrible situación “hay que hacer muchas cosas, pero antes que cualquier cosa lo que el estado necesita es pacificarse”.
Y es que dijo que “mientras que Guerrero no se pacifique, no vuelva a la normalidad será muy difícil intentar cualquier cosa, hay que hacer que Guerrero vuelva a la normalidad”.
Para esto, mencionó lo primero que se tiene que hacer es “dialogar mucho con las organizaciones que manifiestan frecuente en la entidad y a partir de ahí diversificar la economía, hay que llevar más movimiento económico a las regiones donde no hay absolutamente nada, que la gente tenga opciones de empleo y que los guerrerenses aprendan urgentemente a producir más”
—Recibirá un estado convulsionado…se le inquirió.
—Es un estado muy complicado, difícil que no solamente se ve complicado desde dentro sino que los que están afuera lo ven todavía más complicado, —finalizó. (Baltazar Jiménez Rosales)