Por medio de amparos se buscará garantizar clases a los estudiantes

*La educación debe ser continua; lo ordena la Constitución y la Ley General de Derechos de Niñas, Niños y Adolescentes. 

Baltazar Jiménez Rosales

Con el fin de garantizar que los alumnos del nivel básico —preescolar, primaria y secundaria— tengan clases los 200 días que marca el calendario escolar y que no se suspendan por los consecutivos paros de labores de la Coordinadora Estatal de Trabajadores de la Educación (CETEG), las
Asociaciones de Padres de Familia de las Escuelas buscarán promover sendos amparos ante la justicia federal para obligar a las autoridades educativas a que los niños tengan clases de manera ininterrumpida, independientemente de los paros laborales que haga el magisterio disidente.
Para esto, explicó en entrevista el presidente de la Asociación Estatal de Padres de Familia, Saúl Castro Hernández, apenas hace unos días sentó un precedente un amparo federal que lograron padres de familia de la Escuela Primaria “Profesor Arturo Guerrero González”, de Cabo San Lucas, Baja California Sur, a través del cual se ordenó a las autoridades educativas de esa entidad y a las federales a garantizar la presencia de un maestro frente a cada grupo en esa institución educativa.
Dijo que este amparo federal viene a sentar un precedente legal importantísimo para garantizar que en Guerrero se cumplan los 200 días de clases que marca el calendario escolar, por la alta incidencia de paros labores que realiza la disidencia magisterial, pues recordó que nada más en este ciclo escolar cuando mucho 100 fueron aprovechados, por el conflicto social.
“Este ciclo escolar 2014-2015 fue uno de los más álgidos que hemos tenido porque hubo una ausencia grande de maestros en las aulas; tenemos escuelas en donde sólo hubo clases tres días por semana, pero tenemos otras que los maestros sólo se limitaron a revisar tareas a sus alumnos, lo cual impactará severamente en el desarrollo educativo de los niños”, mencionó.
En este sentido, agregó que las regiones del estado que más sufrieron el ausentismo de los maestros de las aulas escolares fueron la Montaña, Costa Chica y Tierra Caliente, mientras que en las ciudades como Chilpancingo los maestros iban cuando menos tres o dos días por semana.
Castro Hernández, enfatizó que por eso es importante el precedente legal que sienta el amparo que ganaron los padres de familia de la escuela primaria “Profesor Arturo Guerrero González”, de Cabo San Lucas, estado de Baja California Sur.
Explicó que en esa ciudad, del 27 de abril al 20 de mayo pasado, integrantes de la Sección Tres del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE) se fueron a paro de labores, lo que hizo perder clases a 120 mil alumnos de educación básica, por lo cual los padres de esa escuela se organizaron e interpusieron un amparo indirecto pues fue en representación de una de las alumnas por la cual se argumentó la violación a su derecho a recibir educación de forma continua como lo marca el Artículo 3 de la Constitución.
Detalló que en este caso, el abogado que promovió el amparo como base de sus alegatos tomó la recién aprobada Ley General de Derechos de Niñas, Niños y Adolescentes para demostrar que la educación es un derecho superior y a pesar de que la demanda de amparo fue a nombre de sólo una alumna, fue respaldada por 235 alumnos de esa escuela primaria.
DE esta manera, los padres de familia de esa institución educativa de Cabo San Lucas lograron que el Tribunal Colegiado del Vigésimo Sexto Circuito con sede en aquella entidad del norte del país, les concediera el amparo al considerar que el paro magisterial violó el derecho de los estudiantes a recibir educación de forma continua como lo marca el artículo 3 de la Constitución.
Al respecto, el presidente de la Asociación Estatal de Padres de Familia insistió en que este amparo marca jurisprudencia para que tanto en Guerrero como en los demás estados de la República, cualquier alumno o padre de familia interpongan uno similar para hacer que las autoridades educativas garanticen la presencia de un maestro frente al grupo de sus hijos.
Incluso dijo que con el fin de comenzar a analizar seriamente la posibilidad de interponer un amparo similar en Guerrero, la Asociación Estatal de Padres de Familia que preside ya comenzó a asesorarse con un grupo de abogados pues la idea es salvaguardar el derecho superior de los niños de tener una educación continua.
En este caso, explicó, de lograr este amparo, tanto la Secretaría de Educación Pública (SEP) como la Secretaría de Educación Guerrero (SEG) estarían obligadas a sustituir a los maestros que en determinado momento se fueran a paro de labores.