Piden que el gobierno compre granos básicos a agricultores guerrerenses

Para evitar que los agricultores guerrerenses sigan siendo víctima de acaparadores, “coyotes” o intermediarios, organizaciones de productores consideran que es necesario que el gobierno se convierta en un gran comprador de los alimentos y granos básicos que se producen en la entidad.

A nombre del Frente Popular para el Desarrollo de Guerrero, Antonio Colín Ramírez, dirigente de los ingenieros agrónomos de la entidad, fundamentó la propuesta de las organizaciones campesinas en el hecho de que en la actualidad el Sistema de Distribuidoras Conasupo, S.A. de C.V. (Diconsa) compra al año 35 mil toneladas de maíz, pero a los productores de Sinaloa y otros estados del país.
En este sentido, indicó que sería una cosa muy diferente si esas mismas 35 mil toneladas en lugar de comprarlas a los productores agrícolas de Sinaloa las adquiriera con los campesinos del estado, sobre todo cuando durante los últimos años en la entidad se han registrado cosechas record de maíz, como en el 2014 que casi alcanzó los dos millones de toneladas del grano.
De esta manera, señaló, los campesinos guerrerenses ya no serían víctima de los abusivos acaparadores, “coyotes” o intermediarios que les compran sus cosechas a precios ínfimos “El gobierno no debe abandonar a los productores y dejarlos a su suerte en la comercialización de los productos del campo”, expresó tajante Colín Ramírez.
Por tal motivo, refirió, la propuesta concreta de las organizaciones sociales y campesinas que integran el Frente Popular para el Desarrollo de Guerrero es que Diconsa compre el maíz a los productores de Guerrero, pues además “las reglas de operación señalan que los productos que se consuman en sus tiendas, deben ser de la región donde están establecidas, es decir de productores guerrerenses, y que el volumen que haga falta se traiga de otros lugares”.
Y es que reconoció que los problemas que enfrentan los productores agrícolas guerrerenses son precisamente que no cuentan con los canales adecuados para comercializar su grano, además de que no tienen silos para almacenarlo, razón por la cual terminan malbaratándolo con los acaparadores, “coyotes” o intermediarios.
Colín Ramírez enfatizó que si Diconsa y el gobierno del estado coordinaran esfuerzos, bien podrían comprar sus productos a los campesinos guerrerenses para abastecer tanto a los Centros de Readaptación Social del Estado como a los albergues, asilos de ancianos, comedores comunitarios, entre otros. (Baltazar Jiménez Rosales)

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