Piden cárcel contra el ex director de Transporte

El dirigente de la Coordinadora Estatal de Transportistas Independientes de Guerrero (Cetig), Juan Mendoza Tapia, exigió al gobernador del Estado, Rogelio Ortega Martínez que se proceda judicialmente contra el destituido director de Transportes Juan Larequi Radilla, “por entregar de manera irregular concesiones”. El transportista indicó que la destitución del funcionario no es

suficiente, porque en su gestión cometió faltas graves que tiene que ser castigadas, “nuestra exigencia es que se inicie una investigación, para que las concesiones que entregó de manera irregular”. “El mal ya está hecho, pero ahora lo que se pretende es pedirle al nuevo titular Félix González Figueroa que se lleve al cabo una investigación en contra del ex director Juan Larequi Radilla, primeramente revisar las concesiones que entregó para saber si fueron conforme a derecho y como lo marca la Ley y posteriormente analizar la posibilidad de presentar una denuncia penal en su contra y si resulta responsable que lo pague con cárcel”, indicó Mendoza Tapia, quien ha encabezado en los últimos meses un sinnúmero de tomas a las oficinas de esta dependencia además de actos vandálicos cometidos contra las oficinas. Añadió que demandarán a las instancias fiscalizadoras, como la Contraloría general del Estado, que realicen una auditoría integral a la dependencia para que se detecten las anomalías que cometió Larequi Radilla, quien vendió las concesiones a los transportistas en contubernio con el dirigente Inocente Mojica Peña. Mendoza Tapia reiteró que a pesar de todas las protestas que ha hecho la CETIG, así como la toma de oficinas, bloqueos, marchas y diversas manifestaciones, hasta la fecha a muchas organizaciones de transportistas y trabajadores del volante les han entregado concesiones, pero a nosotros ninguna, cosa que no es justa porque nosotros también las necesitamos, pero el ex director de Transportes, Juan Larequi Radilla, nunca nos quiso tomar en cuenta para recibir ese beneficio, por lo que esperamos que ahora ya sin él, las cosas puedan cambiar a nuestro favor. (Por Abel Miranda Ayala)