Normalistas y otros encapuchados se enfrentaron contra policías y militares

*Fueron 2 las escaramuzas entre estudiantes y sus partidarios contra las fuerzas del orden: hay lastimados en ambos bandos. 

Al menos media docena de elementos policiacos resultaron lesionados en los dos enfrentamientos a pedradas que sostuvieron, en un lapso de casi tres horas, con encapuchados entre los que se afirma había normalistas de Ayotzinapa, y en el que fue necesario la intervención de antimotines del Ejército
para replegar a los embozados, los hechos ocurrieron ayer a mediodía en el túnel del libramiento de cuota a Tixtla.
Desde muy temprana hora personal de la Policía Estatal montó un filtro en el punto conocido como el túnel del libramiento Chilpancingo-Montaña Baja, con la única intención de evitar que normalistas de Ayotzinapa y grupos afines llegaran a Chilpancingo, donde se presumía que intentarían atacar instalaciones electorales, como parte de la semana que acordaron dedicar al boicot del proceso electoral.
Los normalistas, padres de los desaparecidos y miembros de otras organizaciones afines a su movimiento, llegaron al túnel a bordo de nueve autobuses de pasajeros, de los que se apoderaron hace tiempo, los policías les indicaron que podrían pasar sólo si les permitían revisar las unidades y verificar que no llevaran ningún material explosivo o bombas molotov.
Los normalistas no solo no permitieron que se revisaran los autobuses si no que trataron de romper el cerco policiaco lanzando piedras y petardos contra los uniformados, quienes respondieron utilizando granadas de gas lacrimógeno, después los normalistas subieron a las laderas y a la parte alta del túnel y desde ahí estuvieron lanzando rocas a los uniformados.
Al respecto un comunicado oficial señala que los encapuchados se replegaron, abordaron sus camiones y se trasladado a la normal de Ayotzinapa para reagruparse, “depurar” el contingente y más tarde regresar a el túnel a bordo de cuatro autobuses.
Debido a que los policías estatales se vieron superados por las pedradas de los encapuchados, pidieron refuerzo a las fuerzas federales, al sitio llegaron alrededor de 200 elementos comandados por el ya célebre comandante Espartaco, sin embargo no lograron dominar a los estudiantes que arremetieron nuevamente a pedradas contra la columna de uniformados, logrando lesionar a por lo menos 10 elementos entre ellos dos mujeres.
“Por la 4 que se traigan todas las granadas (lacrimógenas) que tengan, ya no nos queda ni una y nos están chingando”, comentaba un oficial de la policía estatal a través del radio, pidiendo más municiones de gas lacrimógeno, ya que ni ellos ni los federales tenían con que repeler la agresión de los normalistas.
Cuando finalmente se sintieron superados, los policías pidieron el apoyo del Ejército, y poco después al sitio arribaron alrededor de 300 elementos militares equipados con cascos, pecheras toletes y mascaras antigás, y sólo al final de la columna algunos de ellos portaban rifles de asalto.
Bajaron de sus unidades, de inmediato se formaron y avanzaron hacia donde se encontraban los encapuchados, pasaron el túnel en el que se explotaron decenas de bombas de gas lacrimógeno, marchaban junto a los policías golpeando sus escudos, eso hizo que los normalistas se replegaran, abordaran sus autobuses y se fueran a refugiar en las instalaciones de la normal “Raúl Isidro Burgos”.
En la refriega los de Ayotzinapa se apoderaron de un camión de carga de una empresa privada, el cual pretendieron prenderle fuego, sin lograrlo gracias a la intervención de los uniformados quienes posteriormente entregaron a su dueño que se encontraba en el lugar.
Cabe mencionar que un autobús de pasajeros con trabajadores que se dirigían a la Ciudad de México quedo varado, el cual fue agredido por personal de la policía estatal, aunque el operador expreso “es lo que ocasionan los normalistas”, para después seguir con su camino sin que registraran heridos, sola una persona del sexo femenino que tuvo una crisis nerviosa porque la unidad fue apedreada y los cristales rotos.
En Chilpancingo Antes, del enfrentamiento, maestros de la Ceteg cerraron simbólicamente las instalaciones del Tribunal Estatal Electoral, mantuvieron encerrados por dos horas a los empleados y realizaron pintas en las fachadas del edificio.
Posteriormente, pasaron al Congreso del estado, donde gritaron consignas contra la realización de las elecciones del próximo domingo y rompieron cristales de la sede del poder legislativo.
En Tlapa En Tlapa de Comonfort, integrantes del Movimiento Popular Guerrerense bloquearon el acceso a la ciudad como parte de sus acciones de boicot a las elecciones del 7 de junio.
En Ayutla de los Libres Un grupo de 30 personas de la Unión de Pueblos y Organizaciones del Estado de Guerrero (Upoeg) bloquean la carretera federal a la altura de Ayutla de los Libres, ubicada en la Costa Chica de la entidad, como parte del plan de acción para boicotear las elecciones.
De manera paralela se lleva a cabo una reunión en Chilpancingo con una comisión de inconformes, representantes del Instituto Electoral y de Participación Ciudadana y de los diferentes partidos para analizar la posibilidad de que se lleve a cabo la elección en ese municipio por usos y costumbres. (Con información de Abel Miranda y agencias)