En 15 años, cuatro jueces han sido cesados y 38 castigados: Jáuregui

A quince años y días de la fundación del Consejo de la Judicatura del Poder Judicial del Estado —inició funciones en mayo del 2000— cuatro son los jueces que han sido cesados y 38 más han recibido sanciones de diferentes tipos que han ido desde apercibimientos hasta destituciones
temporales del cargo con multas económicas, informó el magistrado del Tribunal Superior de Justicia, Julio Lorenzo Jáuregui García.
En su carácter de integrante del Consejo de la Judicatura, el jurista afirmó que el problema de la corrupción en la impartición de la justicia no es privativa de Guerrero, pero además resaltó que es un fenómeno prohijado por dos partes: es decir, para que haya un juez corrupto hay un abogado que lo corrompe, “porque la corrupción es como el amor, se necesita de dos”, expresó.
Cuestionado respecto a las razones por las cuales estos cuatro jueces fueron cesados, mencionó que los señalamientos fueron variados, es decir, desde hacer recibido dinero para favorecer a alguna de las partes en un proceso, por retardar los procedimientos de manera deliberada o por retrasar sentencias.
Sin embargo, insistió en que un juez corrupto existe porque hay abogados litigantes que los corrompen, pues reconoció que en el Poder Judicial, como en la misma sociedad, hay elementos buenos que trabajan bien y hay elementos que en algunas ocasiones se apartan de la legalidad.
Por esto mismo, enfatizó son varios los jueces que han sido destituidos y otros nada más fueron suspendidos de manera temporal por haberse apartado del camino de la legalidad.
En este sentido recordó que en una ocasión, en un encuentro que sostuvo con la Barra de Abogados de Acapulco les dijo que les entregaba una lista de los 54 jueces de Primera Instancia con nombre, domicilio y teléfono proclives a la corrupción, sin embargo, a cambio les pidió también un listado de los abogados integrantes de esa organización que corrompían a los jueces del Poder Judicial.
Y agregó: “si nadie se le acerca a un juez a ofrecerle dinero para que haga algo indebido, pues el juez no lo podrá hacer, pero repito, la corrupción es como el amor, para hacerlo se necesita de dos. (Baltazar Jiménez Rosales)

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