Reprimen a médicos que denunciaron la simulación en combate al Chikungunya
*Que nos echen a la calle no resolverá el problema; “es como
querer tapar el sol con un dedo”, responden los involucrados.
Por Abel Miranda Ayala
Apenas un día después de haber denunciado la simulación del Gobierno del Estado en la atención del brote epidémico de Chikungunya, médicos y funcionarios de la Secretaría de Salud recibieron represalias que incluyen la retención del salario de uno de ellos y la amenaza verbal a otro de que será
despedido, sin embargo no se ha tomado ninguna medida para corregir las fallas en el programa.
El médico Cipriano Gutiérrez Castro, quien hasta ayer seguía siendo Subdirector de Salud Pública de la Secretaría de Salud estatal, habría sido advertido verbalmente que será despedido por sus declaraciones, refirió que lamentablemente su despido no resolverá el problema de Chikungunya, que existe en Guerrero, porque eso es querer tapar “el sol con un dedo” cuando lo que en realidad se requiere en este momento es una inversión mayor del gobierno estatal y federal para contener el brote.
Destacó que de acuerdo con las cifras oficiales se tiene más de cinco mil casos sospechosos de la enfermedad sin embargo no se pueden validar estos casos porque en Guerrero no se tiene los reactivos de laboratorio para hacer las pruebas, entonces solo se muestrea un cinco por ciento y es lo que se reporta como positivo, pero la realidad es mucho más grave.
Brote en Casa Acapulco: El funcionario comentó que la propia residencia oficial del gobernador en Acapulco, fue afectada por la enfermedad: “se tuvieron dos casos de familiares del gobernador enfermos y confirmados de Chikungunya y entonces si nos mandaron a establecer un cerco epidemiológico en torno a la residencia y querían que enviáramos todas las unidades a fumigar, pero les dijimos que con una camioneta se cubría el área y así se hizo”.
Sin embargo esos casos no se registran en las bitácoras como parte del silencio institucional que existe en torno a la epidemia que sufre Guerrero.
En su denuncia inicial realizada el pasado lunes, el médico señaló que desde el mes de diciembre le presentaron un diagnóstico al gobernador en el que se destacaba que de no invertirse 600 mil pesos en gastos operativos para realizar una campaña preventiva se podría tener una incidencia de cerca de cinco mil casos para el mes de mayo y justamente son los que actualmente se tienen y la previsión para el mes de julio, si se mantiene la tendencia actual es que se tendrán más de 25 mil incidencias.
Reiteró que en este momento se requieren más de 120 millones de pesos para la atención del brote pues se tiene registrados infinidad de casos en las dos costas del estado, además municipios de la zona Centro como Chilpancingo, en la zona Norte en Copalillo, y muchos más, de tal forma que el problema ya no está centrado sólo en la costa sino que se ha extendido a toda la entidad.
En sus señalamientos reiteró que de acuerdo con los presupuestos de egresos, el gobierno del estado no ha invertido ni un solo peso de recursos propios en el sector salud desde hace seis años, “simula invertir cuando de un programa federal toma recursos para colocarlos en otro programa, pero de sus recursos propios el gobierno no pone un solo centavo”, insistió.
Esta situación ha llevado a la necesidad de pedir prestado abate a otras entidades como Veracruz, “es casi inconcebible que el Gobierno del Estado no tenga un millón de pesos para comprar el abate que se necesita, y tenga que pedirlo prestado”.
Guerrero punta en investigación: Los médicos despedidos indicaron tener forma de demostrar el trabajo científico que se ha publicado y que se convierte en referente nacional, por lo que de manera personal han cumplido con su responsabilidad, por ejemplo fueron quienes demostraron científicamente la resistencia del mosco transmisor a los insecticidas, ello ha permitido mejorar los sistemas de combate.
“Aquí se instalaron las primeras ovitrampas que después fueron referente nacional y ahora son regla establecida en todo el país, también se modificó la técnica para rociado residual, aquí nació la técnica de bandas para el rociado, que ahora están en el manual de técnica para rociado nacional, que la tomó el CENAPRED”.
Además dijo que en Guerrero se logró demostrar la transmisión vertical de la enfermedad es decir que los huevecillos de una madre infectada ya salen infectados, es decir que no necesitan picar a una persona enferma para que se infecten.
En estas investigaciones ha sido parte fundamental el doctor Felipe Zul Manzanilla quien hasta ayer fungió como asesor de la secretaría en materia de enfermedades de Transmisión por Vectores, pero su salario fue suspendido por ser parte del equipo que reveló las irregularidades.
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