Presuntos Policías Comunitarios controlan la seguridad en Chilapa
El sábado pasado un grupo de civiles a bordo de 12 camionetas irrumpieron en las instalaciones de la Policía Municipal de Chilapa y se llevaron todo el armamento, además se apostaron en la glorieta de la salida hacia Zitlala, revisaron autos y quitaron teléfonos celulares a quienes se encontraban, para
evitar ser tomados en video o que la ciudadanía pida auxilio a las autoridades.
Poco antes de las 6 de la tarde, los civiles llegaron a la ciudad y se presentaron como policías comunitarios que llegaron para poner orden ante la inseguridad del municipio, sin embargo, Chilapa no es un lugar en donde se haya conformado aun una corporación comunitaria.
El secretario de seguridad pública de Chilapa, Job Encarnación Hernández, informó vía telefónica que al salir del cuartel de la policías municipal, los supuestos comunitarios se trasladaron al hotel Las Brisas donde están hospedados los elementos de la Gendarmería Nacional con la intención también de desarmarlos, pero ya había elementos militares resguardando el lugar y se retiraron los civiles.
Llegaron a la glorieta a la salida de la ciudad y se instalaron ahí para hacer revisión de vehículos, quitar teléfonos celulares a quienes los portan para evitar ser tomados en video, que les tomen fotografías o que pidan auxilio a autoridades.
La comunicación entre habitantes de la ciudad es vía telefónica desde sus hogares y no se ve gente en las calles por temor a que puedan ser agredidos.
Solo se sabe que hay mucho temor y que se escuchan tiroteos por varios lugares sin precisar si son enfrentamientos o tiros al aire.
Poco después de las 8 de la noche arribo un grupo más de elementos del ejército mexicano y los supuestos policías comunitarios se replegaron fuera de la ciudad.
Continúan sin entregar las armas a los 40 policías municipales que desarmaron, y aseguran que no se irán hasta que el secretario de Seguridad Pública municipal, Job Encarnación, sea destituido o se detenga a los causantes de la violencia.
Las supuestas autoridades comunitarias, comisarios y pobladores armados con machetes, palos y rifles, explicaron que la irrupción que inició el sábado por la tarde se debe a que en sus comunidades hay unas 40 personas desaparecidas; no pueden entrar a la cabecera municipal porque los levantan, extorsionan o golpean; no hay transporte a sus poblados porque los transportistas tienen miedo de viajar a Chilapa, y la inseguridad tiene colapsado el comercio y la educación de sus hijos.
En el lugar se encuentra el Ejército, la Gendarmería y la Policía Federal, pero hasta por la tarde-noche continuaban dialogando para que los comunitarios devuelvan las armas a los policías municipales.
El tradicional tianguis dominical de Chilapa se suspendió ante la falta de comerciantes, artesanos y visitantes, que por temor optaron por no viajar a esa ciudad, mientras que fuentes informaron que el alcalde priista, Francisco Javier García, se trasladó a la Ciudad de México. (NOTYMAS)
evitar ser tomados en video o que la ciudadanía pida auxilio a las autoridades.
Poco antes de las 6 de la tarde, los civiles llegaron a la ciudad y se presentaron como policías comunitarios que llegaron para poner orden ante la inseguridad del municipio, sin embargo, Chilapa no es un lugar en donde se haya conformado aun una corporación comunitaria.
El secretario de seguridad pública de Chilapa, Job Encarnación Hernández, informó vía telefónica que al salir del cuartel de la policías municipal, los supuestos comunitarios se trasladaron al hotel Las Brisas donde están hospedados los elementos de la Gendarmería Nacional con la intención también de desarmarlos, pero ya había elementos militares resguardando el lugar y se retiraron los civiles.
Llegaron a la glorieta a la salida de la ciudad y se instalaron ahí para hacer revisión de vehículos, quitar teléfonos celulares a quienes los portan para evitar ser tomados en video, que les tomen fotografías o que pidan auxilio a autoridades.
La comunicación entre habitantes de la ciudad es vía telefónica desde sus hogares y no se ve gente en las calles por temor a que puedan ser agredidos.
Solo se sabe que hay mucho temor y que se escuchan tiroteos por varios lugares sin precisar si son enfrentamientos o tiros al aire.
Poco después de las 8 de la noche arribo un grupo más de elementos del ejército mexicano y los supuestos policías comunitarios se replegaron fuera de la ciudad.
NO DEVUELVEN LAS ARMAS:
Los cientos de pobladores de comunidades que el sábado irrumpieron en Chilapa armados con rifles y escopetas mantenían ayer instalados tres retenes en los accesos a la cabecera municipal y otro en la glorieta.Continúan sin entregar las armas a los 40 policías municipales que desarmaron, y aseguran que no se irán hasta que el secretario de Seguridad Pública municipal, Job Encarnación, sea destituido o se detenga a los causantes de la violencia.
Las supuestas autoridades comunitarias, comisarios y pobladores armados con machetes, palos y rifles, explicaron que la irrupción que inició el sábado por la tarde se debe a que en sus comunidades hay unas 40 personas desaparecidas; no pueden entrar a la cabecera municipal porque los levantan, extorsionan o golpean; no hay transporte a sus poblados porque los transportistas tienen miedo de viajar a Chilapa, y la inseguridad tiene colapsado el comercio y la educación de sus hijos.
En el lugar se encuentra el Ejército, la Gendarmería y la Policía Federal, pero hasta por la tarde-noche continuaban dialogando para que los comunitarios devuelvan las armas a los policías municipales.
El tradicional tianguis dominical de Chilapa se suspendió ante la falta de comerciantes, artesanos y visitantes, que por temor optaron por no viajar a esa ciudad, mientras que fuentes informaron que el alcalde priista, Francisco Javier García, se trasladó a la Ciudad de México. (NOTYMAS)
Comentarios
Publicar un comentario