Normalistas tomaron la caseta y quemaron propaganda electoral
Alumnos de la Normal de Ayotzinapa, padres de los 43 estudiantes desaparecidos y grupos de personas afines a este movimiento, se manifestaron ayer para refrendar la exigencia del regreso con vida de los estudiantes que fueron plagiados en Iguala.
En sus actividades bloquearon por un rato la caseta de Palo Blanco y después retiraron propaganda electoral que quemaron frente al palacio de gobierno.
Los normalistas llegaron a Chilpancingo a bordo de cinco autobuses y tres camionetas tipo pick-up, se dirigieron a la caseta de Palo Blanco, se apoderaron del control del tráfico y dieron paso libre a todos los automovilistas.
Unos 20 minutos después al sitio se presentaron cientos de elementos anti motín de la Policía Federal, lo cual motivó que los normalistas se retiraran del lugar.
De regreso a Chilpancingo los manifestantes, descendieron de los camiones en la avenida Lázaro Cárdenas, frente a la tienda Aurrera y de ahí partieron caminando rumbo al centro de la ciudad, en el camino retiraron al menos una veintena de lonas con propaganda electoral de diversos partidos políticos.
“Estamos haciendo un barrido de basura electoral, porque en Guerrero no habrá elecciones y no podemos permitir que está basura siga inundando las calles”, señaló uno de los normalistas que encabezó la marcha.
Al llegar a la entrada del paso a desnivel, los manifestantes abordaron nuevamente los autobuses y se trasladaron hasta el palacio de gobierno donde acomodaron varias de las lonas pegadas a la enorme puerta de metal y ahí les prendieron fuego, después lanzaron un par de petardos al interior del edificio, en seguida volvieron a abordar los camiones para trasladarse a las instalaciones de la Normal “Raúl Isidro Burgos”.
La movilización se realizó a dos días de que se cumpla el octavo mes de la desaparición de 43 estudiantes de Ayotzinapa que acudieron a secuestrar camiones en la ciudad de Iguala y, de acuerdo con la teoría de la PGR, allá se toparon con miembros de la delincuencia organizada y policías municipales coludidos con ellos, que los atacaron y a 43 de ellos se los llevaron. Después los habrían asesinado y calcinado en el basurero de Cocula.
Los manifestantes advirtieron que en las próximas dos semanas se incrementará la intensidad de movilizaciones, porque se tiene que cumplir el acuerdo de la Asamblea Nacional Popular en el sentido de boicotear el proceso electoral. (Por Abel Miranda Ayala)
En sus actividades bloquearon por un rato la caseta de Palo Blanco y después retiraron propaganda electoral que quemaron frente al palacio de gobierno.
Los normalistas llegaron a Chilpancingo a bordo de cinco autobuses y tres camionetas tipo pick-up, se dirigieron a la caseta de Palo Blanco, se apoderaron del control del tráfico y dieron paso libre a todos los automovilistas.
Unos 20 minutos después al sitio se presentaron cientos de elementos anti motín de la Policía Federal, lo cual motivó que los normalistas se retiraran del lugar.
De regreso a Chilpancingo los manifestantes, descendieron de los camiones en la avenida Lázaro Cárdenas, frente a la tienda Aurrera y de ahí partieron caminando rumbo al centro de la ciudad, en el camino retiraron al menos una veintena de lonas con propaganda electoral de diversos partidos políticos.
“Estamos haciendo un barrido de basura electoral, porque en Guerrero no habrá elecciones y no podemos permitir que está basura siga inundando las calles”, señaló uno de los normalistas que encabezó la marcha.
Al llegar a la entrada del paso a desnivel, los manifestantes abordaron nuevamente los autobuses y se trasladaron hasta el palacio de gobierno donde acomodaron varias de las lonas pegadas a la enorme puerta de metal y ahí les prendieron fuego, después lanzaron un par de petardos al interior del edificio, en seguida volvieron a abordar los camiones para trasladarse a las instalaciones de la Normal “Raúl Isidro Burgos”.
La movilización se realizó a dos días de que se cumpla el octavo mes de la desaparición de 43 estudiantes de Ayotzinapa que acudieron a secuestrar camiones en la ciudad de Iguala y, de acuerdo con la teoría de la PGR, allá se toparon con miembros de la delincuencia organizada y policías municipales coludidos con ellos, que los atacaron y a 43 de ellos se los llevaron. Después los habrían asesinado y calcinado en el basurero de Cocula.
Los manifestantes advirtieron que en las próximas dos semanas se incrementará la intensidad de movilizaciones, porque se tiene que cumplir el acuerdo de la Asamblea Nacional Popular en el sentido de boicotear el proceso electoral. (Por Abel Miranda Ayala)
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