Bajaron a Apango habitantes de tres poblados; querían rescatar al alcalde

Apango, Gro.- Ayer miércoles la situación en Apango se tornó demasiado tensa debido a que habitantes de tres pueblos bajaron armados a la cabecera municipal para tratar de rescatar al alcalde José Guadalupe Rivera Ocampo, quien cumplió tres días retenido.

Según los vecinos de Apango, el hermano del primer edil de nombre Guillermo, visitó varias comunidades de Mártir de Cuilapan para pedir a la gente que emprendiera la defensa del presidente, mientras que en la cabecera unas 50 personas decidieron acompañar al primer edil en la bodega donde está retenido.
Diálogo tardío, sin acuerdos… El miércoles a las 13:00 horas se tenía prevista la llegada de autoridades estatales, federales y diputados, al punto de acceso principal a la cabecera municipal, donde aproximadamente 500 ciudadanos mantienen un bloqueo desde la madrugada del lunes.
Se llegó la hora y ninguna autoridad había acudido para negociar la solución de las demandas a los habitantes del pueblo y, con ello la liberación del alcalde que está retenido desde la tarde-noche del mismo lunes.
Solo estaba el visitador general de la Comisión de Derechos Humanos del Estado, Fernando Esteban Ramírez, con un grupo de cuatro representantes del mismo organismo.
Ellos mediaron durante prácticamente todo el día con los inconformes de Apango y los pueblos vecinos que bajaron a la cabecera.
Además, vigilaron que al presidente municipal no se le vulneraran más sus derechos humanos. Del Gobierno del Estado se esperaba la visita del Subsecretario de Gobierno para asuntos Jurídicos, Victoriano Sánchez Carbajal; mientras que del Congreso la Comisión de Gobierno y, de la federación, los representantes de CONAGUA, Gobernación y del Registro Agrario Nacional (RAN).
Se dieron las 15:00 horas y los pobladores seguían a la espera, bajo la lluvia, advirtiendo que no liberarían al alcalde en tanto no hubiera acuerdos concretos.
Después de esa hora, los representantes de Coddehum recibieron una llamada y luego informaron a los protestantes que ya se trasladaban de Chilpancingo las autoridades requeridas junto a un notario público para la firma de acuerdos.
Excusaron que los representantes de gobierno no habían podido llegar a la hora indicada debido a que “primero tuvieron que atender el problema con los trabajadores del Gobierno del Estado que habían tomado el Palacio de Gobierno”.
Fue hasta las19:00 horas que arribaron los funcionarios; la Secretaria de Asuntos Indígenas, Martha Sánchez Néstor; el Delegado de CONAGUA, Humberto Gastelum Espinoza y el representante del Estado.
Sin embargo, ante la falta de los representantes de Gobernación Federal y del RAM, los ciudadanos se negaron a establecer el diálogo para concretar acuerdos. Aclararon que necesitaban la presencia de “todos” los involucrados.
Apunto del enfrentamiento… Antes, aproximadamente a las 4:00 de la tarde empezaron a bajar varios vehículos de las comunidades de La Esperanza, Zotoltitlán y Hueyitlalpan, quienes pretendían entrar a la cabecera municipal y ver la situación en la que se encontraba el alcalde.
Además, justificaron que los pobladores de Apango pretendían negociar obras y recursos para su localidad, dejando fuera de la obra social a las comunidades.
De momentos, los ciudadanos de la cabecera quedaron frente a frente con los grupos que bajaron de los tres pueblos, incluso, los locales denunciaron que sus vecinos traían gente armada detrás de ellos para provocar una confrontación y rescatar al presidente.
Y es que denunciaron que Guillermo Rivera, hermano del alcalde, estuvo desde el martes visitando a los pueblos para pedirles que defendieran al presidente municipal. Además, les “calentó” la cabeza diciéndoles que se negociarían obras a nombre del municipio con las autoridades, pero sin contemplar a las comunidades.
Del lado de los vecinos de Apango no había gente civil armada pero sí estaban los policías municipales que han dado la espalda al presidente, para apoyar al movimiento que exige en primer lugar agua potable, regularización de tierras y atención a conflictos agrarios, así como la renuncia del alcalde y una auditoría al Ayuntamiento.
Gracias a la intervención de los representantes de la Coddehum que dialogaron con la gente de las comunidades vecinas, no se registró un enfrentamiento.
Y es que se explicó que los derechos del alcalde estaban siendo respetados y no había sido agredido físicamente, además de que lo único que se buscaba con el movimiento de Apango era terminar con el problema de agua potable, y no acaparar recursos, proyectos y obras.
Después de media hora de diálogo los habitantes de las tres comunidades entendieron la situación y se retiraron.
En tanto, el alcalde José Guadalupe continuaba retenido hasta las 21:00 horas de ayer debido a que, a la misma hora no había acuerdos ni atención debida por parte de las autoridades federales y estatales. (Agencia Periodística de Investigación)

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