Por el mal trato recibido, IEPC y TEE no participan en la Mesa de Gobernabilidad
Con toda anticipación, tanto el Instituto Electoral y de Participación Ciudadana (IEPC) como el Tribunal Estatal Electoral (TEE) notificaron diplomáticamente al gobernador interino del estado, Rogelio Ortega Martínez que no participarían en la Mesa de Gobernabilidad Política Guerrero 2015 a
la cual los había convocado, principalmente —y en pocas palabras— por el mal trato que ha tenido para con los dos organismos electorales.
En el caso del IEPC, su presidenta, Marisela Reyes Reyes le dice al mandatario estatal que este organismo no participará en tal Mesa de Gobernabilidad hasta en tanto no cuente con las condiciones presupuestales necesarias que le posibilite continuar con la organización del proceso electoral, mientras que la titular del TEE, Hilda Rosa Delgado Brito le contestó que no acudiría a su convocatoria porque desde que asumió la titularidad del Ejecutivo Estatal ignoró los planteamientos y requerimientos que le hizo mismos que llevaban el objetivo de establecer estrategias de trabajo para el desarrollo armónico del presente proceso electoral.
El oficio de contestación de la presidenta del Consejo General del IEPC está fechado el 17 de abril del presente año, aunque fue recibido en la Unidad de Oficialía de Partes de la Secretaría Particular del gobernador el 20 de abril, es decir, un día antes de la instalación de la Mesa de Gobernabilidad Política Guerrero 2015.
En ese documento, de número 10 34 de la Presidencia del IEPC, Reyes Reyes indica al gobernador del estado que debió haber enviado la invitación al pleno del Consejo General del Instituto Electoral y no de manera particular a los siete consejeros y al secretario ejecutivo, a fin de que la propuesta fuera valorada al seno del órgano colegiado.
Asimismo, a nombre de los consejeros electorales, que también firman el oficio de contestación, la presidenta del IEPC le reconoce a Ortega Martínez el impulso de eventos como la Mesa de Gobernabilidad, “en aras de generar civilidad y confianza en el proceso electoral”.
Pero agrega: “no obstante, en razón a la circunstancia de precariedad presupuestal actual del Instituto Electoral y de Participación Ciudadana del estado de Guerrero, que en los hechos dificulta al extremo el cumplimiento de las atribuciones legales de este órgano electoral, consideramos no participar en dicha mesa, en tanto no tengamos las condiciones presupuestales para cumplir con las obligaciones que la Constitución y la Ley Electoral local nos imponen”.
Además, en el documento Reyes Reyes insiste por enésima ocasión en que le autorice la ampliación presupuestal “necesaria que nos posibilite continuar con la organización del proceso electoral de gobernador, diputados y Ayuntamientos que a ambas instituciones, desde el ámbito de nuestras facultades y competencias, nos ocupa, y que representa un factor fundamental para la gobernabilidad del estado y el país.
Por su parte, a nombre de los magistrados del TEE, la presidenta de este órgano jurisdiccional, Hilda Rosa Delgado Brito, a través de su oficio número TEE/PRE/282/2015, después de agradecerle al gobernador del estado “cumplidamente” la invitación, le hace cuatro consideraciones, entre ellas que desde su llegada al Ejecutivo Estatal, el Tribunal le planteó “entre otras muchas acciones y requerimientos, “la conveniencia de realizar reuniones con los dirigentes de los partidos políticos e instituciones electorales, con el propósito de establecer estrategias de trabajo para el desarrollo armónico del proceso electoral, sin haber logrado despertar su interés” Y agrega: “ahora desconozco los términos y las bases en que se pretende elaborar y firmar dicho documento —la Mesa para la Gobernabilidad—.
En su oficio, Delgado Brito dice a Ortega Martínez que supone que en el fondo de esta acción va el deseo de invitar a los actores políticos de los diferentes partidos para que coadyuven, dentro de sus respectivas campañas, a crear un clima de tranquilidad, apartado de tensiones y de crispaciones políticas, sin embargo, le aclara que en el TEE “desde un principio estamos sumados a ese deseo porque también queremos ver a una ciudadanía entusiasta y participativa”.
Al respecto, enfatiza: “tenga usted la seguridad de que desde nuestro ámbito de competencia seguiremos haciendo lo que os corresponde para contribuir en ese legítimo propósito”, pues además, “la naturaleza, la misión y la visión de una institución autónoma como la que me honro en presidir, tiene en esencia el cumplimiento cabal e íntegro de las normas jurídicas vigentes, y por ende su camino es independiente a la firma de pactos o de acuerdos políticos, así como de acciones mediáticas que pudiesen devenir en interpretaciones sesgadas”.
Así, tras declinar a la invitación para formar parte de la Mesa para la Gobernabilidad, Delgado Brito destaca que “independientemente de nuestra inasistencia al acto, le reitero nuestro indeclinable compromiso por el fortalecimiento de la democracia y que seguiremos poniendo nuestro mejor y mayor esfuerzo para hacer de este proceso electoral un evento que tenga como un común denominador el puntual cumplimiento del esencial objetivo: tener unas elecciones pacíficas, con transparencia, objetividad, legalidad, certeza y con estricto respeto a los derechos humanos. (Baltazar Jiménez Rosales)
la cual los había convocado, principalmente —y en pocas palabras— por el mal trato que ha tenido para con los dos organismos electorales.
En el caso del IEPC, su presidenta, Marisela Reyes Reyes le dice al mandatario estatal que este organismo no participará en tal Mesa de Gobernabilidad hasta en tanto no cuente con las condiciones presupuestales necesarias que le posibilite continuar con la organización del proceso electoral, mientras que la titular del TEE, Hilda Rosa Delgado Brito le contestó que no acudiría a su convocatoria porque desde que asumió la titularidad del Ejecutivo Estatal ignoró los planteamientos y requerimientos que le hizo mismos que llevaban el objetivo de establecer estrategias de trabajo para el desarrollo armónico del presente proceso electoral.
El oficio de contestación de la presidenta del Consejo General del IEPC está fechado el 17 de abril del presente año, aunque fue recibido en la Unidad de Oficialía de Partes de la Secretaría Particular del gobernador el 20 de abril, es decir, un día antes de la instalación de la Mesa de Gobernabilidad Política Guerrero 2015.
En ese documento, de número 10 34 de la Presidencia del IEPC, Reyes Reyes indica al gobernador del estado que debió haber enviado la invitación al pleno del Consejo General del Instituto Electoral y no de manera particular a los siete consejeros y al secretario ejecutivo, a fin de que la propuesta fuera valorada al seno del órgano colegiado.
Asimismo, a nombre de los consejeros electorales, que también firman el oficio de contestación, la presidenta del IEPC le reconoce a Ortega Martínez el impulso de eventos como la Mesa de Gobernabilidad, “en aras de generar civilidad y confianza en el proceso electoral”.
Pero agrega: “no obstante, en razón a la circunstancia de precariedad presupuestal actual del Instituto Electoral y de Participación Ciudadana del estado de Guerrero, que en los hechos dificulta al extremo el cumplimiento de las atribuciones legales de este órgano electoral, consideramos no participar en dicha mesa, en tanto no tengamos las condiciones presupuestales para cumplir con las obligaciones que la Constitución y la Ley Electoral local nos imponen”.
Además, en el documento Reyes Reyes insiste por enésima ocasión en que le autorice la ampliación presupuestal “necesaria que nos posibilite continuar con la organización del proceso electoral de gobernador, diputados y Ayuntamientos que a ambas instituciones, desde el ámbito de nuestras facultades y competencias, nos ocupa, y que representa un factor fundamental para la gobernabilidad del estado y el país.
Por su parte, a nombre de los magistrados del TEE, la presidenta de este órgano jurisdiccional, Hilda Rosa Delgado Brito, a través de su oficio número TEE/PRE/282/2015, después de agradecerle al gobernador del estado “cumplidamente” la invitación, le hace cuatro consideraciones, entre ellas que desde su llegada al Ejecutivo Estatal, el Tribunal le planteó “entre otras muchas acciones y requerimientos, “la conveniencia de realizar reuniones con los dirigentes de los partidos políticos e instituciones electorales, con el propósito de establecer estrategias de trabajo para el desarrollo armónico del proceso electoral, sin haber logrado despertar su interés” Y agrega: “ahora desconozco los términos y las bases en que se pretende elaborar y firmar dicho documento —la Mesa para la Gobernabilidad—.
En su oficio, Delgado Brito dice a Ortega Martínez que supone que en el fondo de esta acción va el deseo de invitar a los actores políticos de los diferentes partidos para que coadyuven, dentro de sus respectivas campañas, a crear un clima de tranquilidad, apartado de tensiones y de crispaciones políticas, sin embargo, le aclara que en el TEE “desde un principio estamos sumados a ese deseo porque también queremos ver a una ciudadanía entusiasta y participativa”.
Al respecto, enfatiza: “tenga usted la seguridad de que desde nuestro ámbito de competencia seguiremos haciendo lo que os corresponde para contribuir en ese legítimo propósito”, pues además, “la naturaleza, la misión y la visión de una institución autónoma como la que me honro en presidir, tiene en esencia el cumplimiento cabal e íntegro de las normas jurídicas vigentes, y por ende su camino es independiente a la firma de pactos o de acuerdos políticos, así como de acciones mediáticas que pudiesen devenir en interpretaciones sesgadas”.
Así, tras declinar a la invitación para formar parte de la Mesa para la Gobernabilidad, Delgado Brito destaca que “independientemente de nuestra inasistencia al acto, le reitero nuestro indeclinable compromiso por el fortalecimiento de la democracia y que seguiremos poniendo nuestro mejor y mayor esfuerzo para hacer de este proceso electoral un evento que tenga como un común denominador el puntual cumplimiento del esencial objetivo: tener unas elecciones pacíficas, con transparencia, objetividad, legalidad, certeza y con estricto respeto a los derechos humanos. (Baltazar Jiménez Rosales)
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