Un enfrentamiento entre ejidatarios de Tecuiziapan y Analco deja dos muertos
Un conflicto agrario por la disputa de dos mil 700 hectáreas de terreno desató una balacera entre ejidatarios de Mártir de Cuilapan (Apango) y Tepecoacuilco que dejó un saldo de dos hombres muertos, tres heridos y catorce personas detenidas.
El enfrentamiento de registró a las cuatro de la tarde entre habitantes de los poblados de San Miguel Tecuiziapan, municipio de Tepecoacuilco, y de Analco, perteneciente a Mártir de Cuilapan quienes se disputan 2 mil 700 metros cuadrados del predio denominado “El Cerro”.
En la balacera perdieron la vida Braulio Maximino Soto, de 26 años de edad, y Roberto Escandón Francisco, de 33 años de edad, ambos campesinos originarios y vecinos del poblado de Analco, municipio de Mártir de Cuilapan.
Cabe hacer que el cuerpo de Roberto Escandón fue encontrado hasta las siete de la mañana de ayer domingo. Tras la refriega fueron detenidos Sabino y Víctor Díaz, Gerardo Vázquez, Maclovio Muñoz, Domingo Campos, Aquileo Álvarez, Joaquín Campos, Eusebio Méndez, Armando Atilano, Simeón Marcos, Noé Campos y Efraín Sebastián, así como tres personas más que resultaron heridas de los cuales se desconoce sus identidades.
Al lugar de los hechos llegaron policías de las diferentes corporaciones policíacas quienes sitiaron la zona de conflicto, mientras que el agente auxiliar del Ministerio Público en turno realizaba las diligencias de ley.
La Fiscalía General del Estado informó que inicialmente los habitantes de San Miguel Tecuiziapan discutieron acaloradamente con las autoridades comunitarias de Analco, pero al final de cuentas salieron a relucir las escopetas y pistolas que llevaban y dio inicio a una nutrida balacera. San Miguel Tecuiziapan y Analco forman parte del circuito de comunidades nahuas conocido como El Alto Balsas y se encuentran sobre la ribera del río Mezcala.
Recientemente el Tribunal Agrario número 51 con sede en la Ciudad de Iguala falló a favor de la comunidad de Analco otorgándole dos mil 700 hectáreas, sin notificar a las autoridades de San Miguel Tecuiziapan.
Sobre los dos muertos, los familiares se opusieron a que los cadáveres fueran trasladados a las instalaciones del Servicio Médico Forense (SEMEFO) para la práctica de la necropsia de ley. (Miguel Campuzano)
El enfrentamiento de registró a las cuatro de la tarde entre habitantes de los poblados de San Miguel Tecuiziapan, municipio de Tepecoacuilco, y de Analco, perteneciente a Mártir de Cuilapan quienes se disputan 2 mil 700 metros cuadrados del predio denominado “El Cerro”.
En la balacera perdieron la vida Braulio Maximino Soto, de 26 años de edad, y Roberto Escandón Francisco, de 33 años de edad, ambos campesinos originarios y vecinos del poblado de Analco, municipio de Mártir de Cuilapan.
Cabe hacer que el cuerpo de Roberto Escandón fue encontrado hasta las siete de la mañana de ayer domingo. Tras la refriega fueron detenidos Sabino y Víctor Díaz, Gerardo Vázquez, Maclovio Muñoz, Domingo Campos, Aquileo Álvarez, Joaquín Campos, Eusebio Méndez, Armando Atilano, Simeón Marcos, Noé Campos y Efraín Sebastián, así como tres personas más que resultaron heridas de los cuales se desconoce sus identidades.
Al lugar de los hechos llegaron policías de las diferentes corporaciones policíacas quienes sitiaron la zona de conflicto, mientras que el agente auxiliar del Ministerio Público en turno realizaba las diligencias de ley.
La Fiscalía General del Estado informó que inicialmente los habitantes de San Miguel Tecuiziapan discutieron acaloradamente con las autoridades comunitarias de Analco, pero al final de cuentas salieron a relucir las escopetas y pistolas que llevaban y dio inicio a una nutrida balacera. San Miguel Tecuiziapan y Analco forman parte del circuito de comunidades nahuas conocido como El Alto Balsas y se encuentran sobre la ribera del río Mezcala.
Recientemente el Tribunal Agrario número 51 con sede en la Ciudad de Iguala falló a favor de la comunidad de Analco otorgándole dos mil 700 hectáreas, sin notificar a las autoridades de San Miguel Tecuiziapan.
Sobre los dos muertos, los familiares se opusieron a que los cadáveres fueran trasladados a las instalaciones del Servicio Médico Forense (SEMEFO) para la práctica de la necropsia de ley. (Miguel Campuzano)
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